El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Martorell ha decidido reabrir la investigación sobre la muerte de Isak Andic, el dueño de la multinacional Mango.
Andic perdió la vida el pasado 14 de diciembre al caer desde más de 100 metros de altura mientras caminaba por un sendero cerca de las cuevas de Salnitre, en Collbató (Barcelona).
Los agentes han tomado declaraciones de varias personas que se encontraban en el área en el momento del incidente y han revisado el teléfono móvil de Andic, que quedó destruido tras la caída. Este dispositivo, junto con otros efectos personales del empresario, fue recuperado al día siguiente por los Mossos en la zona.
Una vez que la policía recibió los resultados de la autopsia, elaboró un informe que fue enviado a la jueza, en el cual se desestimaba cualquier indicio de homicidio.
Con este informe, la jueza decidió emitir un auto de sobreseimiento provisional, lo que permitía reabrir el caso en caso de surgir nuevos indicios o solicitudes de investigación.