"¡Código 33, necesitamos apoyo!". Esta fue la inquietante frase que sonó por el circuito intercomunicador de los vigilantes del Metro de Barcelona el sábado, cuando cuatro de ellos fueron apaleados por un grupo de vándalos y uno ha terminado perdiendo un ojo. Los profesionales pidieron ayuda al menos dos veces durante cinco minutos, utilizando el código de máxima alerta, pero no la recibieron. Al menos a tiempo.
Lo explica uno de los compañeros del trabajador de 39 años que ha perdido la visión por el puñetazo con un puño americano que le propinó uno de los agresores, un joven de 19 años que está detenido y acusado de lesiones, explicó Metrópoli.
Durante la paliza, las víctimas, cuatro vigilantes, pidieron apoyo por el walkie talkie durante cinco minutos, utilizando el código 33, cuando hay riesgo grave para la integridad de las personas, pero no lo recibieron a tiempo.
Denunciarán: "Es intolerable"
La misma fuente avisa de que "denunciarán" el desamparo a los cuatro efectivos atacados, pues "es intolerable que sucedan estas situaciones y alguien pierda un ojo en su trabajo".
Su demanda se canalizará por una de dos vías posibles. "Por medio del comité de empresa de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) o, directamente, por medio de denuncia a los Mossos d'Esquadra".
Por lo pronto, el comité ya está informado.
Dos movilizados
Al parecer, los cuatro intervinientes tenían cerca al menos dos de equipos de compañeros. Uno de ellos estaba estacionado en la estación del Metro de La Pau, en la misma línea, a cinco apeaderos de distancia y nueve minutos de trayecto del lugar del incidente.
Otro equipo, situado más cerca, sí fue movilizado, pero después de las llamadas de auxilio de los asaltados. También acudió uno de los llamados equipos MAV, de apoyo en tierra.
Vista aérea del Metro de Barcelona, donde ocurrió la agresión a los vigilantes
Tarde: pierde un ojo
La reacción fue tardía. Dos de los atacados presentan heridas en la mandíbula y el tercero ha perdido un ojo.
Fue operado de urgencia en un hospital de Barcelona y permanece ingresado en este centro sanitario desde entonces.
La reunión de salud laboral, aplazada
Fuentes internas de TMB indican que el comité ha pedido una reunión del grupo de trabajo de salud laboral, pero la mesa "no se convocará la próxima semana".
De nuevo, intra muros, el personal afea la "lentitud" de la empresa de transporte metropolitano tras las graves lesiones encajadas por un compañero.
TMB: "Colaboración con Mossos"
Tras la lluvia de golpes, el operador de transporte ha "condenado" los hechos y ha informado en un mensaje en X de que está en contacto con la familia.