Llegar a centenario ha dejado de ser una anécdota para convertirse en una situación casi corriente. Al menos en Cataluña, donde ya hay cerca de 3.000 personas con 100 años o más, en datos del Institut d’Estadística de Catalunya (Idescat) del pasado noviembre, el listado más actualizado.
Hoy, la persona más longeva de Cataluña –y del conjunto de España– es Angelina Torres, de 111 años. No va al médico ni se medica. Y se encuentra “fenomenal”. ¿Su secreto? Nadie lo sabe, pero cada mañana toma un vaso de agua con limón y azúcar.
354 por millón
Nacida en 1913, ha vivido las dos guerras mundiales, la Guerra Civil y la dictadura, las distintas crisis, la pandemia de gripe de 1918 (mal llamada gripe española), la del Covid-19 –no se infectó, pero sí lo hicieron sus familiares–, y ha asistido a innumerables avances científicos y tecnológicos, entre otros.
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Sin embargo, cuando ella nació, llegar a centenario era casi una quimera. Ahora, sin embargo, comparte esta condición con otros 2.854 catalanes, de modo que hay 354 superabuelos por millón de habitantes (eran 318 un año y medio atrás).
Cinco mujeres por cada hombre
En datos provisionales del Idescat, de todos ellos, 2.416 son mujeres (168 más en un año, un aumento del 7,5%), y solo 439 son varones (el 1,9% más tras 8 incorporaciones). En ambos casos, son las cifras más altas de la serie. Asimismo, por cada hombre centenario hay cinco mujeres que llegan a esa edad.
No obstante, hay que resaltar que, por primera vez en más de una década, la tasa de centenarios por millón de habitantes es menor en Cataluña (353,9) que en el conjunto de España (376,3).