Lluc Salellas (CUP), señalado por una polémica ecologista. La construcción del Campus de Salud del Hospital Trueta en Girona ha encendido las alarmas entre vecinos y ecologistas por la "destrucción" del parque Jordi Vilamitjana para construir pisos.
El Ayuntamiento defiende la medida argumentando que el déficit de vivienda en la capital gerundense es insostenible, y que el proyecto contempla la creación de 347 viviendas, de las cuales el 40% serán de protección oficial (VPO).
Pisos vacíos y para turistas
Sin embargo, los vecinos critican que desde el gobierno aprovechan esta justificación para "vender el proyecto". Desde la plataforma El parc no es toca explican a Crónica Global que la inclusión de vivienda protegida es una obligación por normativa europea.
Además, denuncian que Girona cuenta con 1.700 pisos vacíos o destinados a uso turístico, así como con terrenos edificables y naves industriales abandonadas que podrían ser alternativas.
El parque Jordi Vilamitjana, uno de los espacios verdes "más grandes" de Girona, alberga un skatepark, una zona infantil, un pipicán y áreas recreativas que lo convierten en un punto clave para el ocio familiar y deportivo.
De 27.000 a 12.000 metros cuadrados
La plataforma vecinal y los ecologistas critican que el proyecto del alcalde Salellas no sólo hará desaparecer este espacio, sino que también incumplirá el compromiso de ampliar el parque a 39.000 metros cuadrados con la suma de 12.000 metros para equipamientos.
Como alternativa, el gobierno local propone 12.000 metros cuadrados una zona cerca de la riera del Marroch, un área catalogada como inundable, lo cual aumenta la indignación ciudadana. "Nos quedaremos sin parque", lamentan a este medio.
El Trueta, punto de discusión
La polémica empezó con el cambio de ubicación del nuevo Campus de Salud, previsto inicialmente cerca del Santa Caterina, hasta una zona inundable. Desde el Ayuntamiento aseguran a este medio que se implementarán medidas para eliminar ese riesgo.
Aunque los vecinos explican que están a favor del nuevo hospital, critican que no se ubique cerca del Santa Caterina, un emplazamiento más seguro y aplaudido por el sector sanitario. Esto, además, permitiría salvar "el pulmón verde" de la ciudad.
Movilización ecologista
Las asociaciones vecinales y ecologistas ya han iniciado movilizaciones para detener la transformación del parque Jordi Vilamitjana. Han iniciado una recogida de firmas para salvarlo [ver aquí].
Para muchos, la decisión del Salellas simboliza la desconexión entre la CUP -uno de los partidos que hace bandera de la protección del entorno- y los mismos ecologistas. Las dudas sobre su impacto medioambiental y la coherencia de sus políticas siguen alimentando el debate.