La desinfección de la plaga de chinches en el CUAP Sant Fèlix de Sabadell no convence. Los sanitarios que desempeñan su labor en el centro de asistencia 24 horas de referencia de la cocapital del Vallès Occidental alertan de errores y falta crónica de higiene en sus instalaciones.
La Consejería de Salud de la Generalitat tuvo conocimiento de la presencia de estos diminutos e incómodos insectos el mes de octubre. Entonces, afectaban a "una zona concreta" del edificio, en referencia a la sala de espera de pacientes. Pero con el paso de las semanas, el personal se los ha encontrado hasta en sus despachos.
Una sanitaria de la unidad de admisiones incluso halló uno de estos bichos en su mochila, con el riesgo de llevárselo a casa e infestar su domicilio.
Desinfección
Los responsables de la región del Vallès Occidental activaron el "procedimiento de control de plagas", por el que una empresa realizó las "intervenciones oportunas siguiendo el protocolo de la Generalitat", declaran fuentes de la conselleria.
Los técnicos aspiraron e hicieron una "limpieza de choque de calor a fondo de todas las instalaciones del CUAP". Luego, desinfectaron. También lavaron a 60º la ropa de cama, uniformes, cortinas de separación entre boxes y el resto de material textil.
Errores
Ahora, la conselleria está siguiendo la situación "sin haber detectado nueva actividad de chinches", informa a este medio. Los especialistas revisaron por última vez este jueves los detectores de feromonas -trampas- colocados. Pero el sindicato de enfermería SATSE Barcelona habla de "medidas insuficientes".
Víctor Motos, secretario provincial de SATSE Barcelona, cuestiona la eficacia de las medidas adoptadas y del sistema de seguimiento, puesto que el personal de limpieza retiró "la mitad de los detectores" sin querer. "Para demostrar que ya no hay chinches, debe pasar más tiempo", dice, incidiendo en la falta de higiene de las instalaciones.
Mala higiene
La organización mantiene reuniones con los responsables para garantizar la eliminación de las chinches. De color marrón rojizo y dimensiones diminutas, sus picaduras normalmente desaparecen sin tratamiento en una o dos semanas, pero pueden causar reacciones alérgicas o reacciones graves en la piel de algunas personas.
No obstante, "eso es algo secundario", valora el secretario sindical, ya que "las chinches vienen por mala higiene". Es por ello que reclama aumentar la contratación de personal de limpieza para que el centro esté en "una situación óptima 24 horas del día, 365 días al año".