Domingo negro en las carreteras catalanas. Tres conductores han fallecido durante este 13 de octubre en las vías catalanas: dos en la provincia de Girona y uno en Barcelona.
En primer lugar, un motorista ha muerto en la autopista AP-7, en el término de Avinyonet del Penedès (Barcelona), tras chocar con un automóvil a las 14:33 horas. Por causas que se están investigando, el turismo y la motocicleta han colisionado y a consecuencia del accidente el motorista ha fallecido. Tras el siniestro, se han activado cuatro patrullas de los Mossos d’Esquadra, tres dotaciones de los Bomberos de la Generalitat y dos unidades del Sistema de Emergencias Médicas (SEM).
Segundo motorista muerto este domingo
Apenas dos horas más tarde, otro motorista ha fallecido al salirse de la vía con su vehículo en la carretera N-260, a la altura del municipio gerundense de Toses.
El Servei Català de Trànsit ha informado de que el accidente ha tenido lugar poco antes de las 16:20 horas en el kilómetro 146 de la citada carretera N-260. Por causas que ahora se investigan, el motorista se ha salido de la vía y ha caído por un barranco de difícil acceso.
Otro fallecido en Palol de Revardit
Por último, el conductor de un todoterreno también ha muerto este domingo y otra ocupante ha resultado herida grave poco antes de las 17:42, al salirse el vehículo de la C-66 y chocar con una valla en Palol de Revardit (Girona).
El muerto es un vecino de Olot (Girona) de 67 años. Otros dos ocupantes han podido ser evacuados (la herida grave es la pasajera delantera, quien ha sido trasladada al Hospital Trueta de Girona).
Fin de semana trágico
Con esta víctima, son 105 las personas que han muerto en las carreteras interurbanas de Cataluña este año, de las que 42 eran motoristas.
Los dos motoristas y el conductor del todoterreno muertos completan un fin de semana trágico. Este sábado, 12 de octubre, también murió un joven de 23 años en Caldes de Montbui (Barcelona), quien fue arrollado por una chica de 18 años borracha. La joven acababa de sacarse el carnet de conducir y conducía bebida, probablemente hacia las fiestas del pueblo, que se celebraban este fin de semana.