Un hombre ha muerto de forma repentina en una cala cercana a la playa de La Fosca, Palamós (Girona). El fallecido no presentaba signos de violencia, sin embargo, los Mossos d'Esquadra se han encontrado con una escena grotesca: varias gallinas decapitadas y esparcidas por el lugar, ya que "estaba practicando un ritual", de acuerdo con fuentes policiales consultadas por este medio.
De acuerdo con los Mossos d'Esquadra, el caso está pendiente de autopsia. Ha sido la periodista Anna Punsí quién ha avanzado los hechos en X.
El ritual
Los hechos han ocurrido sobre las 5:15 de la madrugada de hoy, 4 de agosto. Fuentes policiales han confirmado a Crónica Global que el fallecido estaba en la playa con su mujer y con sus hijas. Cuando estaban todos reunidos en el lugar, el hombre empezó a decapitar gallinas para llevar a cabo un ritual. No obstante, se encontró mal y la familia dio el aviso a la policía. Cuando los Mossos d'Esquadra llegaron al lugar, no pudieron hacer nada para salvarle la vida.
Respecto a las gallinas, la policía ha confirmado a este medio que todavía no se sabe el porqué de las decapitaciones, de qué tipo de ritual se trataba o el motivo que habría inducido al hombre a practicarlo. También han podido confirmar que ni a la mujer ni a las hijas se les abrirán denuncias por maltrato animal o por temas de salud pública, ya que "ellas no han participado de forma activa" en las acciones que el fallecido había llevado a cabo.