Inditex, el gigante textil levantado por Amancio Ortega, tampoco pasa el filtro de los ultras del catalán. Un cliente de una de las tiendas que tiene el imperio en Barcelona ha relatado su traumática experiencia con dos dependientes, que entre ellos hablaban en catalán, pero se dirigían en castellano a los consumidores. El mensaje se ha viralizado en X.
Este tuitero, según su versión, se percató de que "dos dependientes del cajero del Stradivarius de Portal de l'Àngel de Barcelona" hablaban, "entre ellos, en un perfecto catalán", pero se dirigían "sistemáticamente a los clientes en castellano" y "sin margen de error". Sorprendido, dice que les preguntó por qué cambian el idioma. Esta fue la respuesta: "Ah, no me doy cuenta, normalmente todo el mundo habla castellano".
"El bilingüismo mata el catalán"
A renglón seguido, este usuario de las redes sociales pone en la diana a todo el grupo Inditex y señala a algunas de sus marcas (Stradivarius, Massimo Dutti, Oysho, Zara, Pull&Bear, Lefties), acusando al grupo de Amancio Ortega de "imperialismo comercial castellanizador y españolista": "La única política lingüística que aplican es que los dependientes hablan castellano al cliente".
En su queja, añade que "el bilingüismo mata el catalán" y que se ha producido un "lavado de cerebro" para que la población considere "lenguas propias de Cataluña" tanto el catalán como el castellano (la más hablada, por otra parte).
Ignorantes
En el mismo hilo, asume que buena parte del problema es que los catalanes, en especial los jóvenes, no tienen ni idea de la historia de Cataluña, algo que empeora con la "desmedida inmigración" latinoamericana. Pero apostilla que todo ello deriva de la "falta de poder, poder político y moral", y a la percepción de los jóvenes de la "debilidad" de los catalanes ("minorización demográfica y subordinación política").
Concluye: "Stradivarius no tiene política lingüística ni da instrucciones al personal para que use el catalán con los clientes [...] Bueno, sí que la tiene, contraria al catalán".