El pirómano de la cárcel de Lledoners se enfrenta a 17 años de prisión por incendiar su celda

Arranca en la Audiencia Provincial de Barcelona el juicio contra el preso que incendió su celda en la prisión de Lledoners (Sant Joan Vilatorrada) la mañana del 19 de noviembre de 2019. La vista está prevista para el próximo martes 28 de mayo a las 10.00 horas, cuando el reo –que se desconoce el motivo por el que está ingresado en prisión—se sentará ante el tribunal de la sección 22 como presunto autor de un delito de incendio con grave riesgo para la vida e integridad de las personas.

Por ello, la Fiscalía reclama una pena de 17 años de prisión y la inhabilitación absoluta para el tiempo que dure la condena. Además, solicita que el acusado indemnice a la Generalitat de Catalunya, por los daños causados en la celda, en la cantidad de 4.103 euros, y exige otras pequeñas cantidades, que oscilan entre los 35 y los 195 euros, que irán destinadas al interno y a los funcionarios que resultaron heridos como consecuencia de su acción.

El reo actuó "siendo plenamente consciente"

Según el escrito de calificación del ministerio fiscal, al que ha tenido acceso Crónica Global, los hechos tuvieron lugar alrededor de las 7:40 horas del martes 19 de noviembre de 2019, en la celda número 12 del módulo 18 del centro penitenciario sito en Sant Joan Vilatorrada (Barcelona). La mañana de autos, el interno, de nacionalidad española, cogió un mechero y prendió fuego a los dos colchones y a las mantas que había en el habitáculo, provocando que el fuego se propagara rápidamente por toda la celda.

Tal y como se extrae del mismo documento, el interno prendió fuego a la celda “siendo plenamente consciente del peligro que suponía su acción para la vida e integridad física del otro interno, así como para el resto de internos y de los funcionarios de prisiones”.

[Un preso herido grave al provocar un incendio en su celda en Lledoners]

La puerta de acceso se bloqueó por el fuego

Cuando los funcionarios de prisión se percataron del incendio, acudieron "debidamente equipados" hasta la celda en cuestión para extinguir las llamas que se propagaban con rapidez. Sin embargo, el fiscal apunta en su escrito que "el peligro causado fue de tal envergadura" que, cuando los trabajadores intentaron abrir la puerta, ésta había quedado dañada a causa del fuego.

De este modo, añade, tuvieron que utilizar una pata de cabra para forzar el acceso, poder acceder al habitáculo en llamas y sacar a los dos internos que residían en el interior.

[Así es como ha quedado la celda agujereada por un interno de la prisión de Ponent (Lleida)]

Un interno y seis funcionarios, heridos

Como consecuencia de estos hechos, el compañero de celda del procesado y otros seis funcionarios resultaron heridos. Por su lado, el reo padeció varios mareos por exposición e inhalación de humo. Mientras, los trabajadores del centro penitenciario, en su mayoría, también presentaron síntomas relacionados con la inflamación de las vías respiratorias al inhalar el humo del fuego. Ninguno de ellos manifiesta secuelas en la actualidad y tardaron entre uno y cinco días en sanar del todo las lesiones sufridas durante el incidente.

Paralelamente, el procesado tuvo que ser trasladado en ambulancia al Hospital Vall d'Hebron de Barcelona con heridas graves en las manos y en la espalda.

Con todo, los seis funcionarios heridos, además de otros compañeros del módulo 18, declararán en calidad de testigos, junto con un agente de los Mossos d’Esquadra, que también se encontraba en la misma zona en el momento de los hechos. El juicio, que se alargará toda la mañana, está previsto que quede visto para sentencia el mismo martes a mediodía.