Malas noticias para los amantes de la Semana Santa. Se mire por donde se mire, las predicciones meteorológicas coinciden en una cosa: bajan las temperaturas. Las lluvias, por su parte, van a ser muy puntuales y localizadas. Así que mal para los que quieren playa, peor para los que esperan lluvias.
Los mapas que maneja el Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat) pone en evidencia que si el frente de bajas presiones que va a azotar la Península llega muy debilitado a Cataluña. Mientras que la próxima DANA augura unas fiestas pasadas por agua, aquí ésta no llega. "Va a ser una Semana Santa marcada por la inestabilidad", sentencia el profesor de Meteorología y Climatología la Universidad Carlemany, Guillem Martín.
Atención a partir de Ramos
Los indicadores apuntan a que el domingo de Ramos va a haber un tiempo estable, mayormente soleado y mayor presencia de nubes por el oeste y el norte de la comunidad autónoma. Esta es la zona principal que va a experimentar de forma más directa los efectos de la depresión por venir.
Las lluvias van a llegar por fin a Cataluña. Y de manera intensa. El meteorólogo Samuel Biener, de Meteored, asegura que de lunes a miércoles las precipitaciones se van a extender por todo el territorio. “La gota fría que azota la Península va a ser absorbida por una masa polar y el frío y la lluvia harán acto de presencia”, asegura el experto.
Mal arranque de Semana Santa
Martín indica que esto se debe a una depresión que a final de esta semana se va situar al oeste de la Península y va hacer descender varios frentes de bajas presiones, cargadas de lluvia.
Ambos tienen claro que los días de máxima inestabilidad de Semana Santa y con una fuerte bajada de las temperaturas van a ser de lunes a miércoles. “El martes está previsto que Barcelona no supere los 13ºC”, augura Biener. Un frío impropio de la época.
Peligro por las lluvias
La noticia de las lluvias es un buen augurio para la situación de sequía que vive Cataluña, no para los que tienen escapadas al aire libre durante esos días. Biener y Martín coinciden en que las lluvias van a ser intensas en toda Cataluña, "en especial en el norte y sur de Catataluña", concreta Martin.
Pese a todo, el Meteocat da un respiro a la zona de costa, según sus mapas, las lluvias apenas llegarán a la línea marítima durante esos días, aunque no se descartan chubascos aislados. Martín sostiene que en el noreste de Cataluña sí es cierto que las lluvias pueden ser más aisladas, pero también más peligrosas: mucha agua en poco tiempo.
Nieve en los Pirineos
El Pirineo, especialmente, y algunos puntos del norte de las provincias de Lleida y Girona, ciudad en la que también pueden escaparse algunas lloviznas, pero de carácter menor. De lunes a miércoles las nevadas van a darse en cuotas de 1.500 metros.
Lo mismo pasará entrado el viernes Santo y, sobre todo, el sábado. La bajada de temperaturas ayudará a las nevadas, la única buena noticia para los amantes del esquí. Claro que Biener que el viento hará acto de presencia.
Situación incierta
Más allá del miércoles la previsión está gobernada por la “incertidumbre”, en palabras de Biener. Está previsto que llegue a España un frente atlántico pero que puede llegar mucho más debilitado a tierras catalanas.
El sol y las nubes bajas se impondrán en toda Cataluña de manera generalizada. Eso sí, los amantes de la playa tampoco pueden respirar muy aliviados. Las temperaturas van a ser, como mucho, suaves.
Temperaturas al alza
Los termómetros empiezan a descender a partir del domingo de Ramos y van a ir en caída libre hasta bien entrado el jueves Santo, como afirma Biener, luego empezará un ligero ascenso, aunque puede venir acompañado de nubosidad.
Biener no descarta que estos mapas se acaben decantando por una situación de temperaturas más elevadas y alguien puede darse el primer chapuzón del año. Eso sí, a partir del lunes de Pascua las lluvias pueden regresar.