Los turistas lo tendrán más difícil para no pasar de gratis por Tossa de Mar. El Ayuntamiento de este municipio gerundense, de los más visitados de la Costa Brava, cobrará entrada a los visitantes que quieran adentrarse en su casco antiguo, célebre por sus inconfundibles murallas.
El consistorio trabaja en la redacción de un proyecto que cierre la parte alta, aquella que ofrece las icónicas vistas del municipio, y hacer pagar por su acceso en temporada alta, es decir, en verano.
Echar a los "turistas de autocar"
El alcalde Martí Pujals tiene en la diana al que llama "turista de autocar", es decir, aquél que pasa unas pocas horas en el municipio visitando el casco histórico o bien echándose en la playa a tomar el sol sin gastar su dinero en los negocios y hoteles de la zona.
Lo ha avanzado en El Gerió Digital y lo ha confirmado en conversación con Crónica Global el propio jefe del gobierno municipal, que asegura que su "prioridad" es echar a estos dos tipos de visitantes, que "no dejan un solo euro, solo basura en las papeleras".
"No puede ser que quien invierta en el pueblo no se sienta a gusto porque está saturado de personas que no aportan nada económicamente; no es que no las queramos, es que no nos las podemos permitir. El modelo turístico de cantidad y precios bajos se está cargando el pueblo", justifica.
Para verano de 2024
Los ayuntamientos tienen pocos mecanismos a su alcance para declarar una guerra efectiva al turismo masivo, y Pujals es consciente de ello, por lo que aboga por "aumentar el gasto" que hacen los visitantes en beneficio de los negocios de la zona.
Los técnicos del consistorio están estudiando el proyecto, del que todavía no se han acordado detalles tan relevantes como los precios de las entradas. Trabajan para que entre en vigor en verano de 2024, es decir, en temporada alta, cuando el municipio recibe tal aluvión de turistas que agotan sus 22.500 plazas de hoteles, apartamentos, pensiones y cámpines.
Entrada gratis para quien pernocte en un hotel
"Lo estamos valorando todo, todavía no hay nada decidido", en palabras del regidor de Junts, que contempla que turistas que pasen la noche en algún establecimiento hotelero, así como los vecinos, tengan entrada gratis al recinto enmurallado de Tossa.
Como puntos de acceso, barajan habilitar la Iglesia Vieja de Sant Vicenç, el parque o la zona de los cañones. Y para acabar de confeccionar el modelo, analizarán los resultados de la prueba piloto puesta en marcha en el faro para cobrar por su acceso, ya que también sirvió para contabilizar el flujo de visitantes.