El rapero balear Josep Miquel Arenas, conocido en el mundo artístico como Valtonyc, ha anunciado a primera hora de este sábado que regresará a España después de seis años como prófugo de la Justicia en el extranjero, tras ser condenado a prisión por enaltecimiento del terrorismo e injurias al Rey. 

En el mensaje que ha lanzado a través de la red X (antes denominada Twitter), Valtonyc comparte protagonismo con el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, también huido de la Justicia, con el que ha compartido estancia en Bélgica.

Tres años y medio de prisión

"Por todo lo que hemos luchado, reído, vivido y llorado. Gracias, 'president'", se puede leer en el texto, al que incorpora varias fotografías suyas junto al líder de JxCat.

En 2017, la Audiencia Nacional condenó a tres años y medio de prisión a Arenas, en una sentencia que devino firme un año después, tras ser ratificada por el Tribunal Supremo, que rechazó un recurso presentado por el abogado del rapero, Gonzalo Boye, que también se encarga de la defensa de Puigdemont.

Puigdemont responde

"Volver siempre es la mejor parte de la aventura", añade Valtonyc en su mensaje, en el que describe su estancia en el extranjero como "seis años en el exilio", sin alusión alguna a sus cuitas con la Justicia española. 

Por su parte, Puigdemont no ha tardado en responder al rapero. También a través de la red X, el político fugado ha expresado a Valtonyc sus deseos de un buen retorno "a tu tierra, que es la nuestra. Contigo, Valtonyc, todos regresamos un poco".

“Gracias por resistir un exilio injusto y acompañarnos sin desfallecer nunca. Ha sido un honor compartir este viaje”, ha añadido el exjefe del Govern.

Sin extradición

Detenido en 2012 y condenado también por humillación a las víctimas del terrorismo y amenazas personales, el rapero huyó poco antes de entrar en prisión y se refugió en Bélgica desde donde instó al Tribunal de Estrasburgo para que retrasara su ingreso en prisión, lo que le fue denegado. 

A partir de entonces, se puso a disposición de la justicia belga, que decidió dejarle libre a condición de no abandonar el país mientras se tramitara su caso. El país centroeuropeo se ha negado a extraditarle a España.

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