La fiscalía de Barcelona, en coordinación con la Unidad Especializada de Derechos Humanos y Memoria Democrática de la Fiscalía General del Estado, apoya la admisión a trámite de una querella por crímenes contra la humanidad y torturas presentada por el sindicalista Carles Vallejo, detenido en dos ocasiones en los años 70 en la Ciudad Condal.
Se trata de la primera vez que la fiscalía pide al Estado que se investiguen las torturas del franquismo, un hecho que abre la puerta a indagar los crímenes que la Ley de Amnistía impedía esclarecer. Además, recuerda que la nueva Ley de Memoria Democrática, en su artículo 29, impone al Estado a investigar las violaciones de los Derechos Humanos ocurridos en el marco de la guerra civil y de la dictadura franquista, así como en el periodo que va desde la muerte de dictador hasta la entrada en vigor de la Constitución Española.
Derecho a la verdad y la reparación
Teniendo en cuenta el nuevo marco normativo, la jurisprudencia nacional e internacional y los tratados y convenios, el Ministerio Público concluye que no puede rechazarse de plano la querella de Vallejo, sino que los hechos denunciados deben ser investigados. Además, recuerda al Estado que tiene la obligación no solo de garantizar el derecho a la justicia, sino también a la verdad y la reparación de las víctimas.
La querella criminal en cuestión fue interpuesta en noviembre de 2022 por una decena de entidades, que denunciaron a seis policías franquistas por torturas en la Jefatura Superior de Via Laietana de Barcelona: un comisario jefe, un comisario y cuatro inspectores de la Sexta Brigada Regional de Búsqueda Social.
Palizas y asfixia
Vallejo asegura que durante 20 días estos seis policías lo sometieron a constantes torturas y humillaciones por su militancia política y su actividad sindical. Sostiene que durante ese tiempo estuvo atado y encapuchado, que le propinaron golpes y patadas por todo el cuerpo y que llegaron a colocarle una bolsa en la cabeza para impedir que pudiese respirar. Todo, añade, con el objetivo de delatara a sus compañeros del sindicato.