Cruzar un puente colgante es una experiencia que entusiasma a toda la familia, tanto a los grandes como a los pequeños. El balanceo del suelo, las vistas a ambos lados de la pasarela... se trata de una aventura que gusta a todos.
Además, los puentes también tienen su historia y desplazarse hasta los pueblos donde se construyeron siempre equivale a echar un vistazo al pasado. Estos son los cinco puentes colgantes más impresionantes de Cataluña. 'Así que a calzarse y preparar una escapada!
1. El puente colgante de Rupit
Rupit da la bienvenida a los forasteros con un puente colgante ubicado en la entrada del municipio. Construido en 1945 para acceder al centro de la población, al cruzarlo se llega a las antiguas calles empedradas que transportan al paseante hasta el medievo.
2. El Congost del Mu
En La Noguera se encuentra el Congost del Mu, saliendo desde Camarasa. Con pasarelas a 20 metros de altura, construidas con madera, se llega ellas desde senderos naturales que bordean el río Segre.
3. La Via del Nicolau
Si se quieren emociones fuertes, la Via del Nicolau está suspendido a 35 metros de altura. Esta excursión supone una ruta fascinante para toda la familia en el corazón del parque natural del Cadí-Moixeró. A principios del pasado siglo se utilizaba como un corredor de madera, pero hoy está pensado exclusivamente para el turismo rural.
4. El puente colgante de la Palanca del Segre
Esta excursión de unos tres quilómetros cruza por cascadas, bosques de ribera y ganado. Este puente de madera se halla justo después de una zona de picnic para hacer un alto en familia.
5. El Congost de Montrebei
Al igual que el Congost del Mu, esta ruta ofrece unas vistas espectaculares del desfiladero del Seguer, a medio camino entre Lleida y Huesca. Las paredes tienen hasta 500 metros de altura. ¡No te lo puedes perder!