En las últimas elecciones generales de 2019 se imprimieron aproximadamente 375 millones de papeletas. Según la startup CO2 Revolution, para compensar el impacto ambiental de tal producción sería necesario plantar 2.035 árboles.
Para llegar a esta conclusión, la empresa ha tenido en cuenta, además de la producción de papel, otros factores que generan huella de carbono, como el consumo de tinta e impresión.
Más de 800 toneladas de papel
Según CO2 Revolution, dicha producción supone un gasto de 818 toneladas en papel. Asumiendo que la producción de papel genera 0,92 toneladas de CO2 aproximadamente, la emisión de dióxido de carbono al aire de dicha cantidad supone 754 toneladas de CO2.
Para conocer la huella de carbono la compañía cuenta con un departamento experto en cálculo para contabilizar las emisiones de gases de efecto invernadero, garantizando la precisión de las mediciones mediante la norma ISO 14064. Una vez calculada la huella, la reforestación es actualmente una manera óptima de compensarla.
2.035 árboles
La startup ha calculado el impacto, basándose en su experiencia. Según Juan Carlos Sesma de CO2 Revolution, "para dicho cálculo hay que tener en cuenta muchas variables: ubicación de la repoblación, años de permanencia, tipo de repoblación, y densidades, especies y proporciones óptimas a considerar. Nuestra estimación se asemeja bastante a una plantación mixta de coníferas y frondosas que se podría hacer en Galicia, territorio donde llevamos a cabo más proyectos".
Así, para compensar 754 toneladas, según la compañía, haría falta plantar unos 2.035 árboles en una superficie aproximada de 1,85 hectáreas y a una densidad de plantación inicial de 1100 p/ha.
35 años para compensar el impacto
"A lo largo del periodo de permanencia escogido, 35 años en este caso, serán necesarios una serie de tratamientos en la masa con los que llegaremos a una densidad objetiva de 900 p/ha correspondiéndose dicha densidad con unos 1.665 árboles.
Una vez transcurridos estos 35 años, esta masa habrá absorbido las toneladas necesarias para compensar las emisiones producidas en este proceso de impresión de papeletas electorales”, asegura Sesma.