El próximo lunes arranca en la Audiencia Provincial de Barcelona el juicio a un joven que presuntamente drogó a una chica en Barcelona para violarla.
Según el escrito de la fiscalía, al que ha tenido acceso Crónica Global, la víctima y el procesado se conocieron a través de la red social Instagram en marzo de 2019. Tras mantener varias conversaciones se intercambiaron los números de teléfono y siguieron hablando a través de Whatsapp.
Anuló su voluntad
El 19 de marzo ambos se citaron para conocerse en persona en un bar de Barcelona. El ahora acusado, sostiene el ministerio público, fue el encargado de pedir dos cócteles en la barra y aprovechó para echar barbitúricos en la bebida de la chica. “Poco después, incluso cuando no se había terminado el cóctel, la víctima comenzó a sentirse mal”, recoge el escrito.
Tras salir de este local ambos fueron a otro de la zona. Posteriormente, el acusado condujo a la víctima a su domicilio donde mantuvo relaciones con ella. La fiscalía sostiene que la joven estaba “sin consciencia y sin capacidad de reacción debido a los barbitúricos que el acusado había puesto en su bebida”, por lo que en ningún momento pudo prestar su consentimiento.
Piden para él ocho años de cárcel
Por estos hechos la fiscalía pide para él ocho años de cárcel por un delito de abuso sexual con penetración. Además, solicita que no pueda acercarse a la víctima a menos de 1.000 metros ni comunicarse con ella durante los siete años siguientes a su salida de prisión.
En concepto de responsabilidad civil el ministerio público solicita que el procesado pague 12.000 euros a la víctima por el daño moral causado.