Aparca en la acera, entra en un bar, la policía lo multa y se lía: está detenido

La Policía Local de Mataró vivió este sábado una situación de lo más surrealista después de que intentasen multar un vehículo que estaba subido completamente a la acera en la calle Antoni Capmany, en la puerta de un bar.

Su propietario, al ver a los agentes denunciando el coche salió a increparles y se enzarzó con ellos en una acalorada discusión. Claro, esto fue a más cuando, además de la multa, los policías sacaron el alcoholímetro para comprobar si estaba en condiciones de coger el vehículo.

Su amigo, también detenido

El hombre se negó a soplar y continuó la disputa, por lo que los agentes se dispusieron a arrestarlo. Pero ahí no quedó la cosa, ya que uno de sus amigos, al ver que estaban intentando detenerlo, salió en su defensa.

El resultado: una multa, el coche al depósito y los dos al calabozo por presunto atentado a la autoridad y otro de resistencia a su detención.

Versión del Sindicat d’Habitatge

El Sindicat d'Habitatge de Mataró (Barcelona) ha explicado en un tuit, que los hechos sucedieron cuando el hombre "tenía el coche encima de la acera porque estaba recogiendo a su madre con movilidad reducida" en la localidad.

Entonces, tras una gestión "chulesca, violenta y desmedida" de los agentes, le pidieron los papeles del coche y le obligaron a hacer dos pruebas de alcoholemia, que dieron resultado negativo, y le identificaron. El vecino lanzó a los agentes "de mala manea el DNI", y ellos --según el sindicato-- se le echaron encima y lo apalearon, en sus palabras.

"Comportamiento brutal y matonil"

"Este no es un caso aislado: el comportamiento brutal y matonil de la policía es sistemático en nuestros barrios y una prueba más de la deriva autoritaria del estado y del ayuntamiento frente a la situación de crisis económica y social", ha avisado la entidad.

Policía local de Mataró Ajuntament de Mataró

También ha lamentado la propuesta de los partidos políticos sea "aumentar el control policial y la represión" y sofocar a porrazos el malestar que se vive en los barrios obreros y humildes de la ciudad, en sus palabras.

Una “brutal injusticia”

"Más policías no se traduce en mayor seguridad. Al menos no en mayor seguridad para nosotros, la gente de clase trabajadora. Quizás más seguridad para aquellos a los que la policía protege: los bancos, los fondos buitres y las mafias".

En este sentido, han propuesto "organizarse para poder plantar cara", ya sea deteniendo desahucios o apoyando a un vecino contra el que la policía ha cometido una brutal injusticia, han dicho.