La Audiencia Provincial de Lleida ha condenado a nueve años de cárcel al acusado de violar a su prima cuando esta tenía entre siete y 11 años, y a la que dejó embarazada. 

La menor relató durante el juicio, celebrado en enero, que las violaciones se produjeron casi a diario durante cuatro años y que el acusado la amenazó con pegarle si lo explicaba, como avanzó el diario Segre. Además, explicó que si se negaba le pegaba con la mano o con un cable. Las agresiones sexuales continuaron durante cuatro años hasta que la menor se quedó embarazada y el caso salió a la luz.

Dan credibilidad a la víctima

Los psicólogos que la atendieron tras conocerse los hechos consideran que el relato de la menor es “muy creíble”. De hecho, lo narrado por la víctima considera con la versión del agresor, que reconoció los hechos, a excepción de que hizo uso de la violencia.

Por estos hechos lo han condenado a nueve años y tres meses de cárcel como autor de un delito continuado de agresión sexual a una menor de 16 años con acceso carnal, aunque el tribunal le ha aplicado los atenuantes de confesión y reparación. Además de la pena de prisión, tendrá que indemnizarla con 20.000 euros. Una vez cumplida la pena privativa de libertad no podrá acercarse a la víctima durante 12 años. También lo inhabilita para ejercer cualquier profesión que requiera contacto regular con menores durante 15 años. 

No aplican el agravante de parentesco

El tribunal no ha aplicado el agravante de parentesco, al entender que al ser primos la relación familiar no es de primer grado. Tampoco le ha aplicado la atenuante por circunstancias étnicas que pedía la defensa.