Los Mossos d’Esquadra han cazado a un hombre de 37 años tras trepar en dos ocasiones por la fachada de una residencia de mayores de Mollet del Vallès (Barcelona) para robar las pertenencias de los residentes.
El primero de los robos tuvo lugar el 11 de mayo, cuando el ahora detenido accedió al patio interior de la residencia y escaló por el muro hasta alcanzar la primera planta. Una vez en el interior del centro el caco sustrajo una tablet, un móvil y un reloj.
Intentó robar una bici de 4.000 euros
Al día siguiente el mismo sujeto entró en una tienda de material deportivo --en la que había intentado sustraer un patinete eléctrico sin éxito-- y cortó la alarma de una bicicleta valorada en 4.000 euros. Ni corto ni perezoso se subió en la bicicleta e intentó abandonar el local, arrollando al vigilante de seguridad, que consiguió frenarlo e impedir que se la llevara.
El presunto ladrón fue detenido por la policía autonómica y el día 13 de mayo pasó a disposición judicial. Tras declarar ante el juez, el instructor ordenó su salida en libertad con cargos.
El caco, en prisión
Menos de 24 horas después de salir del calabozo el mismo sujeto regresó a la residencia de ancianos en la que ya había robado y escaló de nuevo la fachada. Sin embargo, dos trabajadores del centro lo pillaron in fraganti y evitaron que pudiera consumar un nuevo robo. Pocas horas después, los Mossos d’Esquadra de la comisaría de Mollet del Vallès lo arrestaron de nuevo.
Al detenido, que tiene 22 antecedentes por delitos de índole similar, le atribuyen la autoría de tres robos --dos con fuerza y uno con violencia-- y un hurto. Por todo ello el juez ordenó el 16 de mayo su ingreso en prisión.