Los Mossos d’Esquadra han detenido al vigilante de una plantación de marihuana ubicado en Riudarenes (Girona), de 52 años, como presunto autor de la muerte violenta de su compañero, Artjol R, de 29.
La policía autonómica abrió una investigación el 4 de marzo a raíz de una denuncia por desaparición presentada por un amigo de la víctima. Tras realizar las primeras averiguaciones, los agentes detuvieron al sospechoso por un delito contra la salud pública, Isidro B., que quedó en libertad poco después. Después de varias gestiones los agentes determinaron que la causa de la desaparición podría corresponderse con una muerte criminal.
Restos de sangre de la víctima
En el domicilio del desaparecido localizaron restos de sangre en las juntas de los azulejos de la habitación de la víctima, en el marco de la puerta y en el sofá en el que dormía, según ha podido saber Efe. También en el vehículo del principal sospechoso y en su ropa.
Tras una búsqueda en la que participó la unidad canina, el helicóptero, la unidad de subsuelo y montaña y drones, localizaron en un vertedero ilegal las sábanas y el colchón de la víctima. También colocaron micrófonos en el coche del ahora detenido, Isidro B., que llegó a expresar que “sin cuerpo no hay delito”.
Ingresa en prisión
Días después, los Mossos d’Esquadra localizaron los restos mortales del desaparecido, así como un cuchillo. El pasado 8 de mayo detuvieron al investigado, a quien le constan una veintena de antecedentes.
Este jueves ha pasado a disposición judicial y el fiscal ha solicitado su ingreso en prisión como presunto autor de un delito de asesinato, ya que la principal hipótesis de los investigadores es que cometió el crimen mientras la víctima dormía, y el juez así lo ha decretado.