Conmovedor rescate en el pueblo barcelonés de Tagamanent, cerca del mazizo del Montseny. Una oveja se ha desorientado y ha perdido a su rebaño, quedándose atrapada en la montaña bajo los fuertes chubascos que han recorrido este domingo la comarca del Vallès antes de caer sobre Barcelona. Afortunadamente, un grupo de jóvenes excursionistas ha encontrado el animal y el incidente ha tenido un desenlace feliz.
"Estábamos haciendo la ruta de Tagamanent y hemos podido subir a la ermita, pero ahí una pareja se ha encontrado una oveja cuando ha empezado a caer una fuerte tormenta", señala Noemí, una de las jóvenes del grupo de universitarios que ha dado con el bóvido. Ahuyentados por la lluvia, los excursionistas han empezado a bajar cuesta abajo y se han percatado de que el animal les perseguía.
Embarazada
Los presentes han llamado a los responsables del parque del Montseny y se han puesto en contacto con una protectora de animales, que al ver las fotos que les han enviado de la oveja, han alertado de que podía estar embarazada y que debían llamar al 112. "Hemos avisado y cuando hemos llegado al pueblo, hemos intentado avisar a la policía", relata la testigo, que añade que "por lo visto había dos ovejas perdidas en esa montaña".
Una vez llegados a la vecina localidad de Aiguafreda, el vigilante municipal que estaba de servicio, el agente 1.011, ha acudido para ayudar a los rescatadores y custodiar al animal. "El problema es que solo tenía el teléfono de los ganaderos de Aiguafreda y esta oveja pertenece a Tagamanent. ¿Encontrará a su dueño o tendrá una nueva familia que le adopte?", se preguntaba la joven.
Se ha evitado un accidente
En efecto, el animal volverá con su dueño una vez se dé con el ganadero. Desde la policía municipal explican a este medio cómo ha terminado este curioso episodio: "Me han llamado unos chicos que estaban haciendo una excursión y bajaban. Los forestales al ser domingo no trabajaban y en el 112 no sabían cómo actuar, así que hemos acudido porque los municipales de aquí tenemos servicio las 24 horas", apunta el policía. "He cortado el camino para que la oveja no se escapase hacia la C-17. Menos mal que no ha habido un accidente de tráfico", apunta el agente 1.011.
"Entre un chico que perseguía al animal y yo con el coche municipal, lo hemos llevado al vertedero. Le he puesto comida y agua y he hecho cinco llamadas a pastores, uno de ellos ha venido a buscarla y se la ha llevado a casa. Con la chapa, la podrá identificar y el martes se la devolveremos a su pastor", manifiesta el agente. Un suceso que ha terminado felizmente gracias a los excursionistas, autoridades y vecinos implicados y a su entrega y humanidad, que no distingue entre bípedos o semovientes a la hora de prestar auxilio.