Ecologistas en Acción carga contra el Ayuntamiento de Barcelona por la instalación de 17 cámaras de videovigilancia inteligente que prevé llevar a cabo en paseo de Gracia.

Según la organización, el salto de las cámaras convencionales a estas nuevas, suponen un paso atrás en cuanto a los derechos de las personas. Sobre todo, el derecho a la privacidad o el de reunión en el espacio público.

“Un Gran Hermano Global”

Así, piden a Ada Colau que se olvide de instalar estos aparatos y que se “aleje de convertir Barcelona en un punto más del Gran Hermano global basado en el proyecto europeo Secur' Cities, centrado en el desarrollo de las cámaras inteligentes ante la supuesta amenaza terrorista".



El objetivo del Ayuntamiento con la instalación de estas cámaras, es reducir el número de robos en la zona, que desde 2019 “se han reducido un 49 % en esta área, solo por la eficacia policial", remarcan los activistas.

El Ayuntamiento contesta

El consistorio insiste en que esta medida tiene que verse como un elemento de prevención, y no de control ya que “estas imágenes son una garantía para las víctimas de actos delictivos”.

En cuanto a la vulneración de derechos, recuerda el Ayuntamiento de Barcelona que "el reconocimiento facial está prohibido y las administraciones no pueden llevarlo a cabo".