La jueza titular del Juzgado de Instrucción 4 de Cornellà de Llobregat (Barcelona) tiene abierta una investigación desde noviembre de 2022 contra cinco policías municipales derivada de la denuncia presentada por un particular por presuntos delitos de lesiones y obstrucción a la justicia con el agravante de discriminación por racismo. Así lo ha confirmado este jueves el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) en un comunicado. El joven, de origen marroquí, asegura que, tras identificarle por motivos raciales, le llamaron “moro de mierda” y que llegaron a decirle “te voy a reventar la cabeza”.
Según ha avanzado Eldiario.es el afectado grabó parcialmente la intervención de los agentes ahora investigados, en la que se escucha como se dirigen al joven en los términos de “vete a tomar por culo, que te voy a reventar la cabeza”.
"Quítale el teléfono"
Los hechos se remontan a la madrugada del 24 de octubre de 2022, cuando varios agentes de la comisaría municipal de Cornellà de Llobregat le dieron el alto a la presunta víctima y a otra persona. Al preguntar el motivo de la identificación un policía le respondió “Moro de mierda, ¿tú no eres de por ahí? Vete a tomar por el culo, que te voy a reventar la cabeza”. Cuando otro de los agentes se dan cuenta de que el chico está grabando la escena le ordena a su compañero: “Quítale el teléfono, quítale el teléfono, venga tírale”, recoge el citado medio.
El joven ha explicado que acto seguido los agentes lo tiraron al suelo y lo golpearon. Aunque, según él, borraron el vídeo, la grabación quedó archivada en la papelera del dispositivo, de donde la víctima pudo recuperar las imágenes. Después, llamó a emergencias.
Hematomas y un diente roto
El joven fue asistido en el Hospital de Bellvitge, donde se constató que sufría magulladuras en diversas partes del cuerpo. También tenía un diente roto. Por estos hechos decidió presentar una denuncia ante los Mossos d'Esquadra, que lo derivaron a la misma comisaría en la que trabajan sus presuntos agresores. Finalmente acudió a los juzgados a denunciar estos hechos.
El joven, asistido por el Centro para la Defensa de los Derechos Humanos – Irídia, ha relatado que “estaba herido” y que los agentes no le ayudaron. Al contrario, según su versión, se refirieron a él como “moro de mierda”. Ahora, dice, sufre secuelas por aquellos hechos. “No estoy como antes, no estoy bien. Estoy muy nervioso y no quiero salir de noche ni salir por delante de comisarías”, ha expresado.
Los agentes lo niegan
Según el Eldiario.es los agentes negaron ante la jueza haber golpeado al joven y pidieron que revisaran sus antecedentes penales con el objetivo de desacreditarlo, una solicitud a la que la jueza se ha negado.