La sequía obliga a buscar respuestas y explotar todos los recursos hídricos disponibles para paliar su efectos. En este sentido, el rio Besòs se convertirá antes de final de año en una pieza clave para el abastecimiento de agua en los hogares de Barcelona.
La ampliación de esta planta potabilizadora permitirá cuadruplicar los 200 litros por segundo que se extraen actualmente, hasta alcanzar los 860 antes de que acabe 2023. Así lo anunció este miércoles el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, que visitó la estación junto a la consellera de Acción Climática, Teresa Jordà, y anunció una inversión de 25 millones de euros para aumentar la cantidad de agua potabilizada a través de esta planta de Aigües de Barcelona.
Aceleración de las obras
"El objetivo es aprovechar toda el agua disponible del riego condal y el agua que captaremos de nuevos pozos", dijo Aragonès, ante la incertidumbre de la duración de la sequía y el régimen de lluvias, que pueden llegar a provocar una situación "extrema" para la que "hay que estar preparados". Por ese motivo, la aceleración de las obras de ampliación de la planta se han convertido en una prioridad para antes de final de año.
Con la culminación de estas obras, que se tramitarán por urgencia, la estación de potabilización del Besòs captará toda el agua disponible del acuífero y empezará a usar, por primera vez, agua superficial del río Besòs para el consumo humano.
La peor sequía en 32 meses
Aragonès insiste en que los periodos de escasez de agua serán cada vez más habituales y de mayor intensidad a causa del cambio climático, por lo que ha apostado por adaptarse ante este nuevo escenario, lo que conlleva a la construcción de nuevas infraestructuras como desaladoras y potabilizadoras.
En este sentido, el presidente catalán ha hecho un llamamiento a la “responsabilidad” del resto de instituciones y de los grupos parlamentarios para alejarse de bloqueos. Unas palabras que cobran especial relevancia después de que el pasado 31 de marzo el Govern no lograse consensuar medidas para mitigar los efectos de la sequía. Sin embargo, pese a la urgencia que requiere la solución de este problema, el Govern ha pospuesto la reunión de la mesa del agua con entidades y cargos municipales hasta después de las elecciones municipales del 28 de mayo.