Un nuevo caso de fiesta ‘rave’ está alterando la paz vecinal en Cataluña, en este caso en la localidad gerundense de Sant Jordi Desvalls, en cuyas afueras se desarrolla la concentración, que ha reunido a unas 200 personas.
A primera hora de este sábado la celebración continúa mientras que los Mossos d’Esquadra, que fueron avisados desde primeras horas de este viernes, mantienen controlados los accesos del lugar aunque, por el momento, no contemplan un eventual desalojo de la fiesta, dado que transcurre de forma pacífica.
Ruido muy molesto
Sin embargo, la alcaldesa del municipio, Núria Martínez, ha denunciado de el elevado ruido de la música que procede del lugar donde se celebra la fiesta ilegal está resultando “muy molesto para los vecinos” e incluso ha apuntado la posibilidad de que se escuche también en municipios aledaños, dado el alto volumen.
Martínez ha alertado, en declaraciones a Catalunya Informació, que la ‘rave’ podría prolongarse hasta este domingo, al tiempo que ha manifestado sus quejas porque este tipo de concentraciones sean permitidas.
Quejas de la alcaldesa
“Está muy mal que se permitan estas fiestas ilegales en cualquier sitio, sin represalias ni consecuencias para las personas que las hacen”, ha señalado la regidora, de ERC, que ha recordado que la gestión de esta incidencia corresponde al cuerpo de Mossos.
La policía autonómica ha contabilizado unos 60 vehículos que habrían accedido al lugar del evento, un terreno privado, según ha detallado la alcaldesa, y que además es de difícil acceso.