El juez archiva la investigación por la muerte de Kira: no ve indicios de acoso escolar

El Juzgado de Instrucción Número 31 de Barcelona ha archivado el caso de Kira López, la joven de 15 años que se suicidó en mayo de 2021. El juez considera que no hubo ninguna situación de acoso en el colegio que llevase a la menor a quitarse la vida. Así pues, ha cerrado el procedimiento penal que se seguía contra la escuela Pare Manyanet. 

Así lo ha comunicado el centro educativo a las familias en una carta en la que consta que el juez no ve que la escuela "pudiera tener responsabilidad alguna en esta dolosa situación".

Una larga investigación 

Los hechos se remontan al 19 de mayo de 2021, cuando Kira se suicidó. Tras lo ocurrido, los Mossos d'Esquadra y la Conselleria de Educación abrieron una investigación para averiguar si la alumna, que entonces era estudiante de tercero de la  ESO, podría tener relación con un supuesto caso de acoso escolar. Durante meses, el Juzgado y la policía autonómica han llevado a cabo una investigación exhaustiva y han analizado las comunicaciones de teléfono, redes y ordenador de Kira, han analizado la documentación de la Conselleria de Educación y en el procedimiento tomaron declaración a diez compañeros y amigos de la menor.

En la misiva, la dirección del colegio ha informado a las familias de que, tras las investigaciones, se concluye que "no existe indicio que indique que Kira sufriera acoso escolar" y que "no consta denuncia o manifestación de amigos, compañeros o profesores de que estuviera sufriendo ningún tipo de acoso".

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Además, el centro ha trasladado que el juez no ha encontrado en los dispositivos electrónicos de la menor "ningún indicio ni nada que haga sospechar de la participación de un tercero en la determinación de la menor de quitarse la vida. Lo más destacable son consultas psicológicas, investigaciones relacionadas con sus estudios o plataformas de videojuegos on line".

Mensajes de "muerte" por error

Por último, el juez concluye que el correo electrónico que apareció en el buzón de Kira tras su deceso con las palabras "muerte" y "muere" era un mensaje "que un compañero suyo le envió por error", según el colegio. La escuela también ha comunicado que ha participado en la investigación aportando toda la documentación que le ha sido requerida por el juzgado y que el director de la escuela declaró como testigo para esclarecer los mecanismos de detección y actuación en casos de acoso entre iguales, pero que "ni la escuela ni ninguno de sus miembros han sido nunca objeto de esta investigación".

En diciembre de 2021, el Departamento de Educación --tras una investigación paralela encargada a una auditoría externa-- concluyó que no había indicios de acoso escolar en el suicidio. 

La familia, indignada

Tras conocer la decisión, la familia de la menor se ha echado las manos a la cabeza. Su abogada, Carla Vall, ha explicado que el juzgado de instrucción pertinente archivó el caso de Kira y que la familia y el Ayuntamiento de Barcelona recurrieron hace unas semanas esta decisión ante la Audiencia Provincial de Barcelona. En este sentido, ha reconocido estar "sorprendida por la inacción judicial de la Generalitat, que también está personada".

Mensajes de la abogada de la familia, Carla Vall, tras conocer que se archiva el caso / TWITTER

A través de las redes sociales, Vall ha señalado que los casos de acoso escolar son siempre complejos y ha avisado: "Muchas conductas que, en el caso de ser adultos no hay duda sobre si son delictivas, en menores seguimos pensando que son cosas de niños". Por eso, ha hecho un llamamiento a "reflexionar" y "entender las lesiones irreversibles que se causan bajo la atenta mirada de los adultos". "Los derechos de los niños y adolescentes deben avanzar, tenemos un deber histórico en su protección".