Los Agentes Rurales de la comarca del Montsià, en Tarragona, han encontrado 22 cebos ilegales que han causado la muerte de 6 pájaros. La persona detrás de estas acciones habría cometido los delitos de caza de especies protegidas de fauna silvestre y uso para la caza de instrumentos o artes de eficacia destructiva y no selectiva para la fauna.
El tipo de trampas empleadas por el sujeto, llamadas popularmente “rateras”, son un método de captura que termina con la vida de cualquier tipo de pájaro, independientemente de si su caza está permitida o no. Entre los especímenes hallados sin vida se encuentran una curruca capirotada, tres verderones, un zorzal común y un petirrojo.
Especies protegidas
Todas estas especies, con la excepción del zorzal, están consideradas fauna salvaje autóctona protegida en Cataluña. El petirrojo y la curruca, además, se encuentran en el Listado estatal de especies silvestres en régimen de protección especial como especies “merecedoras de una atención y protección particular por su valor científico, ecológico y cultural”.
Aunque este era un periodo habilitado para la caza del zorzal, esta solo se puede realizar mediante el uso de armas de fuego bajo las normas específicas del reglamento de caza en vigor. El cazador, sin embargo, utilizó un cebo, un sistema prohibido utilizado por los cazadores furtivos en épocas de frío.