Los patinetes eléctricos estarán prohibidos temporalmente, durante un periodo de seis meses, en el transporte público de Cataluña, a la espera de una regulación general sobre el acceso de estos vehículos de movilidad personal en trenes, autobuses, metros y tranvías.
La Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) ha instado este lunes a todos los operadores de transporte público de Cataluña a prohibir durante seis meses los patinetes eléctricos, y para concretar este veto se pondrá en marcha una comisión, integrada por las compañías, en la que se coordinará su entrada en vigor.
Así lo han explicado el secretario de Movilidad e Infraestructuras de la Generalitat de Cataluña, Marc Sanglas, y la tercera teniente de alcalde de Barcelona y presidenta de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB), Laia Bonet, durante una rueda de prensa sobre las tarifas del transporte público de 2023.
"Mecanismos de protección"
"Como ATM no podemos aprobar ninguna prohibición, sino que instamos a los operadores a que hagan estas modificaciones oportunas en sus reglamentos. Habrá una comisión, integrada por todos los operadores, que decidirán en qué momento entrará en vigor esta prohibición, y se comunicará oportunamente", ha detallado Sanglas.
El secretario de Movilidad e Infraestructuras ha defendido que "hay que buscar mecanismos de protección y seguridad para el conjunto de los usuarios, con la voluntad de trabajar por la intermodalidad de todos los modos de transporte".
Precedente: incendio en un vagón de Ferrocarrils
Este veto llega después de que a mediados de noviembre se produjera un aparatoso incendio en el interior de un vagón de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) al quemarse la batería de uno de estos vehículos de movilidad personal, obligando a detener el convoy y evacuar a los pasajeros.
Aunque se ha mostrado partidaria de la compatibilidad del transporte público con otros medios de transporte como los patinetes, Bonet ha reconocido que el incidente de Sant Boi "pone en duda la seguridad" de estos vehículos en determinados casos, por lo que hay que estudiar una regulación.
"Nuestro objetivo, hablo en nombre de TMB, es avanzar hacia una compatibilidad, pero como lo primero es garantizar la seguridad, producido este incidente, no tenemos otra solución que afrontar un trabajo coordinado de todos los operadores de todas las administraciones para ver cómo podemos asegurar que se pueden evitar estos incidentes", ha indicado Bonet.