La Autoridad Catalana de Protección de Datos ha amonestado al Ayuntamiento de Barcelona por el sistema de recogida de basuras puerta a puerta del barrio de Sant Andreu del Palomar. Considera que el hecho de que los vecinos tengan que depositar sus deshechos en bolsas semitransparentes, que dejan el contenido a la vista, y en cubos que deben depositar en la puerta de sus casas supone un riesgo para “los derechos y las libertades” de los usuarios y viola su intimidad.
Fueron las quejas de un particular y de una entidad, recoge El Periódico, las que han llevado a Protección de Datos a pronunciarse al respecto. El organismo considera que el consistorio ha cometido tres infracciones, dos de ellas graves, con la implementación del controvertido sistema de basuras. En concreto, el organismo afea al Gobierno de Colau que no hiciera una valoración de riesgos para determinar si esta recogida puerta a puerta invade la esfera privada de los vecinos que se registraron en el programa que pretende impulsar el reciclaje.
Datos sobre salud
En la misma línea, reprende al consistorio por pedir a los vecinos que revelaran detalles “vinculados en algún caso a datos relativos a la salud” en la solicitud que tenían que rellenar, hecho del que el Ayuntamiento de Barcelona se defiende alegando que reemplazó los formularios por unos nuevos en menos de un día.
No obstante, Protección de Datos insiste en que ni el viejo ni el nuevo formulario plasmaban que los usuarios tienen derecho a pedir que se cancele su consentimiento. Por todos estos hechos, el organismo considera que el consistorio ha cometido tres infracciones, dos de ellas graves y una leve. Aunque el Gobierno de Colau no se enfrentará a sanciones, queda patente que el modelo de recogida de basuras puerta por puerta tiene importantes defectos, que han evitado que se extienda a otros puntos de la ciudad.