Un equipo de investigadores del Hospital Clínic-Idibaps ha encontrado un biomarcador que podría diagnosticar el Alzheimer en una analítica rutinaria, incluso en estados iniciales de la enfermedad.
Así lo ha transmitido el centro hospitalario este miércoles a través de un comunicado, en el que destaca que el Alzheimer es la causa más común de demencia en personas mayores y, junto a otras demencias neurodegenerativas, una de las causas mayores de discapacidad, que tendrá un crecimiento exponencial en las próximas décadas.
150 millones de casos en 2050
Ante la gran incidencia de esta enfermedad entre la población y la velocidad a que, según los científicos, podría propagarse, alcanzando los 150 millones de afectados en 2050, es vital disponer de un diagnóstico exacto para una intervención precoz.
Hasta la fecha, sostienen los expertos, se han encontrado distintos marcadores. Sin embargo, estos se han probado en grupos de pacientes muy concretos. Además, los métodos disponibles en la actualidad, como el análisis de biomarcadores en el líquido cefalorraquídeo o las pruebas de neuroimagen cerebral, son muy fiables, pero caras e invasivas.
Un análisis de sangre rutinario
Según la jefa del Servicio de Neurología del Clínic y de la Unidad de Alzheimer, Raquel Sánchez-Valle, “disponer de marcadores específicos, fácilmente accesibles, como pueden ser biomarcadores en sangre, ayudaría a ofrecer un mayor diagnóstico precoz a una mayor proporción de pacientes”.
Entre junio de 2019 y junio de 2021 se incluyeron 349 personas atendidas de forma consecutiva en diferentes unidades especializadas en este campo del Clínic y, a todas ellas, al margen del procedimiento de diagnóstico estándar, se le realizó un análisis de sangre para la determinación de los cinco marcadores plasmáticos de deterioro cognitivo en estudio. Entre ellos, la proteína ‘ptau 181’, que se correlaciona con la presencia de la enfermedad, incluso en pacientes con pocos síntomas.
A la espera de aprobación
“Para un uso clínico sistemático, el siguiente paso sería obtener la aprobación de las autoridades reguladoras de cara a la financiación de estas pruebas, a través del sistema público de salud”, concluyen los autores.
El estudio lo han coordinado Mircea Balasa, neurólogo de la Unidad Alzheimer y otros trastornos cognitivos e investigador del grupo Enfermedad de Alzheimer y otros trastornos cognitivos del IDIBAPS; Raquel Sánchez-Valle, jefa del Servicio de Neurología del Clínic y de la Unidad de Alzheimer, así como del grupo de investigación del IDIBAPS; y Albert Lladó, neurólogo de la Unidad de Alzheimer y otros trastornos cognitivos e investigador del IDIBAPS. El primer firmante del estudio es Jordi Sarto, neurólogo e investigador del mismo equipo. También han participado profesionales del Centro de Diagnóstico Biomédico (CDB) del Clínic, y ha sido posible gracias a la financiación del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), proyectos 19/00198, 19/00449 and 20/00448.