Las dos partes del cadáver seccionado hallado el lunes en una zona boscosa de Piera (Barcelona) se encontraban a más de un kilómetro de distancia entre sí. Fuentes policiales han confirmado a Crónica Global que a primera hora de la mañana del lunes un ciudadano llamó al 112 para alertar de la presencia de las extremidades inferiores de un cuerpo en un cruce de la riera de Ca n'Aguilera, un camino frecuentado por vecinos que salen a pasear con sus perros. “En un inicio se creyó que se trataba del cadáver de una mujer, por el estado en el que se encontraba el cuerpo, parcialmente quemado”, apuntan desde la policía local, que acudió al lugar sobre las diez de la mañana.
También se desplazaron hasta la zona indicada los Mossos d’Esquadra, que acordonaron la riera para impedir el paso de los curiosos y recabar pruebas del crimen. “No tenemos el cuerpo para hablar de lo sucedido”, apuntan visiblemente afectados los vecinos de una granja cercana, que desde su balcón seguían atentamente el trasiego de los agentes en la riera y en una finca de olivos.
Distancia a la que fueron localizados los dos trozos del cadáver hallado en Piera / CRÓNICA GLOBAL
El torso, en una bolsa
Además del grupo de homicidios de la región policial central de Mossos d’Esquadra, que han asumido la investigación del crimen, también se desplazó hasta el lugar la unidad canina de la policía catalana para tratar de localizar la otra parte del cuerpo. Pero fue una vecina quien a las 14.58 llamó a la policía local para informar de que, mientras paseaba a su perro, había localizado el torso, también quemado, en un campo de fútbol abandonado a escasos metros del carrer Can Aguilera, a las afueras de la urbanización Can Martí.
La parte superior se encontraba “parcialmente cubierta por una bolsa de plástico”. Fuentes policiales apuntan a que los restos mortales fueron transportados en el interior de este recipiente hasta el lugar en el que fueron abandonados.
¿Cuándo abandonaron el cuerpo?
Los dos lugares en los que se encontraron los restos son caminos transitados por vecinos de la zona, como ha podido comprobar este medio. “Pueden pasar unas 200 personas al día”, apunta uno de ellos. Además, quienes depositaron el cadáver no se preocuparon en ocultarlo, de forma que quienes salieron de casa a primera hora de la mañana pudieron atisbar las partes seccionadas cuando los Mossos comenzaron a acordonar la zona.
Uno de los vecinos consultados, que pasea diariamente con su mascota por la riera, ha asegurado que “han tenido que dejar el cuerpo por la noche, porque la tarde anterior no había nada”. La policía local no tiene constancia de ningún desaparecido en Piera en los últimos días.