La Audiencia de Girona ha condenado a 49 años de cárcel a J.V.J.P, el vecino de Arbúcies (Girona) de 76 años que se ofrecía a dar clases particulares a niñas de familias en “situación precaria” para abusar sexualmente de siete de ellas.
La fiscalía solicitaba para el acusado, conocido como “Jony” o “Cuba”, 81 años de cárcel por abusos a diez niñas y la defensa pedía la absolución ante la negación de los hechos por parte del procesado.
La sentencia de la sección cuarta, de la que ha sido ponente el magistrado Daniel Varona, le condena a 49 años de cárcel por tres delitos continuados de abuso sexual con penetración a menor, otro a menor con discapacidad, dos de abuso sexual y uno en grado de tentativa.
Le absuelve no obstante de los otros tres abusos de los que estaba acusado por falta de pruebas ya que, a pesar de los testimonios, dos supuestas víctimas lo negaron durante la vista oral y, en el tercer caso, no se ha podido acreditar.
Se aprovechó de la confianza de los padres
Según la Sala, el procesado se ofrecía a dar clases gratuitas en su casa “para acercarse e intimar con las menores” y, con el mismo fin, se ofrecía a ayudar a sus progenitores en tareas cotidianas.
“Para captar su atención y convertir su domicilio en una especie de refugio para ellas”, a las más pequeñas les daba desde chucherías a regalos y, a las mayores, tabaco y alcohol.
Sorprendido en pleno abuso
La sentencia detalla que, “en todos los casos, se aprovechó de la confianza depositada en él por los progenitores y de la inocencia de las menores para satisfacer sus necesidades sexuales”.
El caso, que se juzgó a puerta cerrada entre el 18 y el 21 de julio de este año, se destapó el 29 de julio de 2019 cuando la madre de una niña de siete años le sorprendió cuando abusaba de ella.
Prisión provisional
La mujer y su marido llamaron al teléfono de emergencias mientras el procesado intentaba huir por una ventana, pero la policía se presentó en minutos, lo detuvo y, desde entonces, está en prisión provisional.
La resolución, que aparte de éste considera probados otros seis casos, afirma que hay “un cuadro probatorio muy amplio”, tanto por los testimonios de las niñas como por elementos corroborativos externos como las declaraciones de los padres, la descripción de los abusos en la agenda de unas de las víctimas o los restos de semen hallados.
Una menor con discapacidad entre las víctimas
Entre los casos están los abusos a una menor de 17 años con discapacidad cognitiva del 85% y a su hermana de ocho años.
La sentencia, que sostiene que seguía “un patrón” para cometer los delitos, condena también al acusado a diez años de libertad vigilada, le prohíbe acercarse a menos de 500 metros de las víctimas durante este tiempo y le obliga a indemnizarlas con un total de 46.000 euros.