Las ocho ciudades que no te puedes perder en Cataluña

Cataluña es una zona de España que destaca no solo por su arquitectura y sus espacios naturales, sino también por su arte, cultura y gastronomía. Estos son los encantos de algunas de las ciudades más bonitas de Cataluña. Y estas son las ocho que no te puedes perder.

1. Barcelona

Es una propuesta muy obvia, pues sin ninguna duda es una de las ciudades más emblemáticas de Cataluña. Esto precisamente es lo que dota a la Ciudad Condal de tanto valor. Ofrece decenas de actividades culturales, una arquitectura única y un sinfín de bares y restaurantes donde degustar la gastronomía típica, como la escalivada, los calçots con salsa romesco y el pa amb tomàquet.

Es indispensable visitar el Parc Güell, el Palau de la Música, la Pedrera, las Ramblas, la Sagrada Familia y la playa de la Barceloneta.

2. Girona

Se trata de una de las ciudades históricas más importantes y destaca especialmente su casco histórico. Atractivos turísticos imperdibles son los Baños Árabes, el Call (barrio judío), la basílica de Sant Feliu, la catedral de Girona y las casas de Onyar. Estos monumentos de distintas épocas de la historia brindan la posibilidad de contemplar las diferencias arquitectónicas y culturales de cada etapa.

3. Tarragona

Tarragona fue una ciudad esencial en la época del Imperio romano. Hoy está declarada como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y es una de las urbes más bonitas de Cataluña. Enclaves relevantes son el circo romano, el anfiteatro romano, la catedral de Tarragona, el Pla de la Seu y las murallas romanas.

En Tarragona hay que degustar su gastronomía típica en platos como la cazuela de romesco, el arrossejat, la paella marinera y el arroz negro.

4. Manresa

El arte presente en Manresa se pone de manifiesto en monumentos como la basílica Santa María de la Seu, de estilo gótico. También hay que resaltar la cueva de Sant Ignasi, así como sus calles medievales y la parte modernista de la ciudad. Esta se perfila en edificios tan destacados como el Casino, el Teatro Kursaal, la Casa de Torrets y la torre Lluvià.

5. Valls

Para los que prefieran hacer turismo en Cataluña más allá de los enclaves más masificados, Valls es una opción que combina a la perfección cultura, arquitectura, naturaleza y gastronomía. La ciudad destaca especialmente por su tradición de los castellers, castillos humanos que se llevan a cabo sobre todo durante las fiestas locales.

Asimismo, el monasterio de Santes Creus, la ciudadela medieval de Montblanc y el santuario de la Virgen de Lledó son maravillas arquitecturas indispensables durante la visita. En la gastronomía local destacan los calçots, los embutidos artesanales y los arroces.

6. Sitges

Desde hace años, Sitges se ha transformado en una de las ciudades emblemáticas de Cataluña gracias a sus maravillosas playas, su festival de cine y su activo ocio nocturno. Mención especial merecen los jardines de Terramar, de estilo novecentista, el Racó de la Calma, el Museo del Cau Ferrat y la iglesia de San Bartolomé y Santa Tecla. Respecto a las playas, es necesario hacer referencia a la cala Morisca, la playa de Port Ginesta, la playa de les Anquines y La Fragata.

7. Figueres

Esta población se hizo especialmente famosa gracias a la debilidad que Dalí sentía por ella. En la actualidad, se pueden ver muchas de sus obras expuestas en el Teatro Museo Dalí. Pero este no es el único atractivo turístico de la urbe. También merecen una visita el castillo de Sant Ferran, que es la fortaleza de época moderna más grande de Europa, la iglesia de Sant Pere y la Rambla.

8. Lleida

La ciudad ofrece a los visitantes un extenso patrimonio cultural y arquitectónico en monumentos como el palacio de la Paeria, el castillo del Rey de Lleida o el castillo templario de Gardeny. También destacan la Seu Vella y la Catedral Nueva. Al igual que muchas otras urbes de Cataluña, Lleida tiene un importante legado modernista que se concentra especialmente en el centro de la ciudad.

En cuanto a gastronomía, en la zona de Lleida son especialmente típicos los caracoles a la llauna, los embutidos y la cassolada.