El Hospital de Reus pagó sobresueldos fuera de contrato a dos de sus directores a pesar de que estaba en situación de quiebra técnica y tuvo que ser rescatado por el Servicio Catalán de Salud (CatSalut), algo que ocurrió en 2020.
Lo denuncian fuentes del sector sanitario. Señalan una de las conclusiones del informe 14/2022 de la Sindicatura de Cuentas relativa al centro sanitario, que era también la ciudad asistencial clave en el conglomerado Innova, en el que se investiga presunta corrupción al por mayor en forma de salarios presuntamente injustificados y contrataciones irregulares, entre otras. El fiscalizador del dinero público afea ahora las remuneraciones adicionales que cobraron Óscar Ros Garrigós y Mateu Huguet Recasens, dos cargos del centro comarcal.
No procedieron
Según la Sindicatura, las retribuciones de Ros --ahora en el CatSalut tras ser destituido y pasar por el sector privado-- y Huguet --ahora gerente de la Fundació Sant Hospital de La Seu d'Urgell-- no procedían. Concretamente, apunta a que el primero cobró un plus de 20.000 euros anuales entre mayo de 2017 y septiembre de 2018 por ser apoderado de otras entidades del grupo sanitario, aunque este extremo "no estaba regulado en el contrato".
En el mismo sentido, el doctor Huguet se embolsó un extra de 15.000 euros anuales por ser director territorial de Gestió Integral Sanitària i Assistencia (Ginsa) "sin que estuviera previsto en el contrato". En ambos casos, la remuneración "no se repercutió a las entidades relacionadas", pese a que el pago estaba pensado para ellas, y pese a que "recibieron los servicios".
Estaba en quiebra técnica
Los complementos fuera de contrato se pagaron a los dos máximos directivos sanitarios pese a que el centro concertado estaba en una situación económica catastrófica desde su construcción e inauguración en 2010. Por lo pronto, el complejo médico se cargó con una deuda de 70 millones de euros derivada de las obras, que algunos sectores sanitarios tildaron de "faraónica". La instalación medía 93.000 metros cuadrados, un espacio excesivo para apenas una plantilla de 1.300 sanitarios.
Quizá por esa carga en su cuenta de resultados, el equipamiento arrastró déficits año tras año, quebrantos que llegaron a superar los ocho millones de euros. En 2019, último año de gestión municipal antes de su rescate por parte del CatSalut, el hospital se anotó números rojos por valor de 111.000 euros.
El CatSalut lo rescató
Ese escenario financiero provocó la intervención de la Generalitat de Cataluña. Como explicó este medio en 2017, el CatSalut se vio forzado a tomar posiciones en la entidad sanitaria por la situación de la tesorería. Aunque inicialmente se pensó en armar un consorcio junto con el Ayuntamiento de Reus, finalmente se descartó esta fórmula y se creó una entidad de derecho público (EDP).
Según el propio Govern [ver aquí la nota], el traspaso del activo conllevó la asunción de parte de la deuda por valor de 49,40 millones de euros. Obligaciones que pasaron de las cuentas del Ayuntamiento de Reus a las de Salud.
Cerebro de 'Innova'
La integración de Reus al CatSalut en 2020 significó la liquidación administrativa del caso Innova. El escándalo de presunta corrupción había estallado diez años antes, en 2012, cuando saltaron las alarmas sobre la deuda del conglomerado municipal Innova: unos 200 millones de euros. Tras esto, la CUP llevó el caso a la Fiscalía Anticorrupción y ello provocó la dimisión del director general de Innova, Josep Prat.
Más tarde, trascendió que Prat, uno de los principales imputados, desempeñaba cargos simultáneamente en la propia Innova, en el ICS y en la privada USP Hospitales. También ha sido citado a declarar en la pieza principal de Innova el exdirector del CatSalut Carles Manté, así como Lluís Miquel Pérez, exalcalde de Reus por el PSC, y el arquitecto Jorge Batesteza. Se investigan siete supuestos delitos.
Eso sí, otras piezas separadas, como una abierta por la colocación de miles de prótesis defectuosas compradas a la empresa Traiber, han terminado archivadas por falta de indicios delictivos.
Como el 'caso dietas' en el IAS de Girona
Los sueldos indebidos en el Hospital de Reus se asemejan a otra controversia por pagos ilícitos a altos cargos: la que cerca a Joaquim Casanovas Lax, el gerente del Instituto de Asistencia Sanitaria (IAS) de Girona. El alto cargo, también exdirector del ICS, se enfrenta a pesquisas del Tribunal de Cuentas por sobrepagos irregulares --que también destapó la Sindicatura de Cuentas-- a su ex número dos: Xavier Saballs.
El procedimiento se encuentra en fase de instrucción en Cuentas, que ha iniciado una actuación de recobro, y ha generado un expediente sancionador del CatSalut a Saballs, como avanzó este medio.