1 de octubre de 2022. En el interior de Cataluña se celebra la quinta jornada de Aviación Adaptada. Personas con discapacidad de diversas asociaciones de España se congregan en el aeródromo de Igualada-Ódena para vivir la experiencia surcar los cielos y rodear los montes escarpados Montserrat. Las jornadas se celebran en un ambiente festivo con grandes pantallas, para retransmitir en directo lo que ocurre en pleno vuelo. Avionetas, planeadores, charlas entre amigos y familia, paellada popular y música con DJ amenizan un día donde se olfatea el espíritu de libertad en cada despegue.
Centenares de personas se trasladaron a las pistas de la capital de la Anoia para disfrutar de este acontecimiento. En la siguiente fotogalería resumimos los mejores momentos de la quinta edición de Aviación Adaptada y, además, para más información e impresiones, puedes leer la crónica de este sábado aquí.
1. Plan de vuelo
Phillip, un piloto de origen francés muy ligado a la lucha para que las personas con movilidad reducida pudieran obtener el certificado para pilotar, llega desde Perpiñán (Francia) como voluntario. No necesita a nadie para entrar y salir de su avioneta: esta adaptada para poder ser pilotada por completo de forma manual.
Phillip última su plan de vuelo / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
2. Cinturón de seguridad
Dos voluntarios ayudan a los participantes en las jornadas para poder montar y desmontar en las diferentes aeronaves. En la imagen, un planeador. Para él, ahora es el momento de volar y ajustarse el cinturón de seguridad.
Voluntarios ayudan a los usuarios a montarse y bajarse de las aeronaves / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
3. Mínimo esfuerzo
Daniel se esfuerza para poder acceder a esta avioneta de forma autónoma.
Daniel accede al cockpit de la avioneta / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
4. Ultimando detalles
Domènech, miembro del club de vuelo de vela de Igualada, revisa el anclaje de una avioneta remolcadora, único enlace para que los planeadores se puedan elevar y despegar..
Domènech realiza los trabajos para unir el planeador a la avioneta / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
5. Calentando motores
Uno de los pilotos supervisa atentamente la pista y alrededores instantes antes de alzar el vuelo.
El piloto de la remolcadora, espera órdenes para el despegue / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
6. Cambio de piloto
Carme, una de las participantes en las jornadas, escucha atentamente las instrucciones sobre los controles del planeador. Una vez estén en el aire les permiten poder manejar el aparato con la supervisión de los pilotos.
Una de las participantes en las jornadas de Aviación Adaptada junto a su piloto en el momento de montar en un planeador / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
7. ¡Tango, Charlie, Bravo!
La gran cantidad de vuelos que se programan para este día obliga a que se acerque, como voluntario, un controlador aéreo desde Barcelona.
El controlador aéreo supervisa la pista y el cielo de Igualada / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
8. ¿Pista libre?
Tráfico de infarto. Cada pocos segundos aterriza o despega una aeronave, con una frecuencia similar a la de los grandes aeropuertos. La pista es un hervidero y no hay margen para el error.
Una avioneta antes de despegar durante las jornadas de Aviación Adaptada en el aeródromo de Igualada-Ódena / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
9. Entre cielo y tierra
Es curioso, tal vez, pero en esta imágen se representan dos mundos contradictorios. La libertad surcando los cielos y la tierra, atrapado en la cápsula de la avioneta.
Vista del interior de una avioneta, en el reflejo, la pista del aeródromo de Igualada-Ódena / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
10. Pájaro en libertad
Las avionetas y planeadores pasan y rodean la gran planicie igualadina. Aterrizaje y despegue, de árbol en árbol y de pista en pista, como si de un pájaro se tratase.
Sillas Voladoras / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
11. Prioridad máxima
Un planeador se aproxima a pista. Al no contar con motor tienen prioridad máxima para aterrizar. Toda la operación la coordinan a través de la radio, entre controlador aéreo y pilotos.
Uno de los planeadores se aproxima a pista / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
12. Otro punto de vista para Montserrat
Montserrat desde el aire. Estas son las grandes vistas que ofrece cualquier vuelo desde el aeródromo de Igualada-Ódena. Un cambio de óptica que refleja sus sierras reconvertidas en montículos.
Montserrat al fondo, en uno de los vuelos durante las jornadas de este sábado de Aviación Adaptada / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
13. Emoción al aterrizar
Al aterrizar, un cúmulo de sensaciones se vienen encima de cada uno de los participantes en el vuelo: desde el piloto hasta los acompañantes.
Carmen Justicia sorprendida al terminar su vuelos / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
14. Amor de madre
Una de las participantes en las jornadas de Aviación Adaptada corre a abrazar y besar a su madre tras bajar de un autogiro. Ellas se envuelven en ese cálido abrazo y le explica la experiencia vivida.
Un beso entre madre e hija / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
15. Viento fresco
Avioneta, planeador, autogiro y ala delta... la variedad crece año tras año y son más los modelos que se suman a este evento. De hecho, este año incluso se podría probar un simulador inmersivo.
Autogiro para dos personas, una de las opciones durante la jornada para surcar los aires / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
16. Las barreras te las pones solo tú
El equipo de voluntarios ayuda a salir a este usuario con la grúa. No hay nada que impida que pueda volar ya que todo se puede adaptar.
El equipo de voluntarios ayuda a salir a un usuario / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)
17. Libertad
Ramona observa en el cielo el paso de una de la avionetas. Unas pocas horas antes nos comentaba lo cerca de la muerte que se encontró hace cinco años y como valora ahora la vida.
Uno de los momentos durante las jornadas de Aviación Adaptada del pasado 1 de octubre en Igualada-Ódena / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)