Nuestras uñas y cabello son un reflejo de nuestra salud, por lo que su cuidado adecuado siempre debe ser una prioridad.

A continuación, te damos una serie de consejos para mantener tus uñas y tu cabello fuertes, sanos y hermosos:

¿Qué debo hacer para que mis uñas estén fuertes y saludables?

Asegúrate de siempre mantener tus uñas limpias. También es recomendable cortarlas en forma recta para evitar que se ensucien y se rompan. Puedes usar un cortauñas o tijeras bien afiladas. Redondealas ligeramente en las puntas de las uñas para obtener la máxima resistencia. Evita las limas lo más que puedas. No te muerdas las uñas ni te quites las cutículas, pues esto puede llevar a infecciones muy peligrosas.

Córtate las uñas con regularidad. Mantenerlas cortas reduce el riesgo de roturas. Para facilitar el proceso, puedes remojar tus pies y manos en agua tibia con sal. Esto las suavizará y te permitirá cortarlas con más facilidad.

Mantén una buena higiene y cuídate de los gérmenes. Usa zapatos a tu medida y cambiatelos todos los días. También es recomendable utilizar crema hidratante para pies o talco, así como desodorante en aerosol para zapatos. Es importante usar zapatillas en la piscina y en las duchas comunitarias, pues esto reduce la interacción con gérmenes y la posibilidad de una infección por hongos entre la uña.

Si notas algo extraño, no repares en gastos y ve al dermatólogo. No es sano que tus uñas se hinchen, que cambien de color o que te causen dolor. El tratamiento de los problemas de las uñas es especialmente importante si tiene diabetes o problemas de circulación sanguínea. Es mejor prevenir que lamentar.

¿Si se trata de la salud de mis uñas, cuando debo consultar con un profesional?

Consulta a tu dermatólogo si notas:

  • Una coloración extraña, como manchas o rayas oscuras debajo de la uña.
  • Cambios en la forma de la uña, acompañados de dolor o hinchazón. Puede tratarse de una encarnación.
  • Sangrado alrededor de la uña.
  • Dolor o hinchazon.
  • Adelgazamiento/engrosamiento de las uñas.
  • Uñas que no crecen.

Ahora que hemos cubierto el tema de las uñas, hablemos un poco del cuidado del cabello.

¿Que debo hacer y que no para mantener mi cabello sano?

El cabello puede sufrir todo tipo de daños si no se le dan los cuidados apropiados. Algunos que vale la pena mencionar son la caspa, la resequedad, la caída del cabello e incluso la interrupción de su crecimiento. Por eso es importante mantener buenos hábitos para darle el debido cuidado a nuestro cabello:

Lávate el cabello regularmente. No lavarse el cabello durante mucho tiempo puede causar acumulación de aceites naturales, lo que trae consigo suciedad, mal olor y afecta nuestra presentación personal. A la larga, la falta de lavado incluso puede causar vellos encarnados, picazón y pérdida del cabello.

Usa productos adecuados para tu tipo de cabello. Es recomendable utilizar productos para el cabello que estén libres de sal, alcohol y químicos, tales como sulfatos y siliconas. Si tienes un cabello delicado o problemático, hoy en día hay una gran variedad de productos veganos hechos a base de frutas disponibles en el mercado.

Cuida de tu salud en general. Para tener un cabello saludable es importante comer de forma saludable y balanceada, dormir lo suficiente y mantenerse bien hidratado. También es recomendable evitar el estrés y consumir mucha vitamina C, que además de ayudar a nuestras defensas, aumenta la circulación de la sangre hacia los folículos pilosos, favoreciendo el crecimiento del cabello.

Sigue un tratamiento y usa productos que vayan acorde con tu tipo de cabello. La forma en que te lavas el cabello y los productos que usas deben depender del comportamiento de tu cuero cabelludo. Por ejemplo, si tienes cabello graso, lávalo regularmente. Si tu cabello está tratado químicamente, no lo laves con demasiada frecuencia ya que puede causar resecamiento. Si se te hace difícil identificar tu tipo de cabello y los cuidados que necesita, sigue los consejos de tu dermatólogo para mantenerlo sano.

Lava tu cabello correctamente. Cuando te bañes, concéntrate en limpiar tu cuero cabelludo, no todo el cabello. Esto mantendrá las raíces limpias, y al mismo tiempo ayudará a preservar los aceites naturales necesarios para mantener el resto del cabello sano e hidratado. Usa acondicionador después de cada lavado, pero asegúrate de solo aplicarlo en el cuerpo y las puntas de tu cabello, nunca en las raíces. De esta manera evitarás la acumulación accesiva de aceite y no tendrás que lavarlo tan a menudo.

Si notas algo fuera de lo normal, recurre a un médico. Si notas una pérdida excesiva de cabello y daños que no responden a ningún tipo de producto, cuidado o tratamiento, quizás sea hora de consultar con un profesional, pues podría existir un problema de salud subyacente.

Si estás buscando un producto que te ayude a mantener tus uñas y tu cabello sanos, un suplemento alimenticio puede serte muy útil, como por ejemplo Phytophanere, un producto en cápsulas que refuerza el crecimiento y volumen del cabello y fortalece el cabello y las uñas.

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