El gas natural es una fuente de energía primaria ampliamente disponible cuyo consumo está creciendo exponencialmente. Eso se debe principalmente a que conlleva menor contaminación medioambiental y se dispone de reservas naturales que garantizan un largo periodo de disponibilidad. Sin duda, una buena noticia ante la crisis energética que se vislumbra a nivel mundial.
Por otro lado, una instalacion de gas natural es la mejor alternativa para el hogar, puesto que con este sistema se ahorra tiempo y ofrece muchas posibilidades: Desde cocinar y hornear hasta sistemas de calefacción y posibilidad de producir agua caliente, y lo más importante, se ahorra dinero todos los meses en la factura energética. Además, si a todo ello se le suma la ventaja de dejar una menor huella de carbono, tanto mejor.
Pasos para instalar gas natural
Para llevar a cabo una instalacion de gas en el hogar, hay que seguir una serie de pasos encaminados a obtener el suministro. Lo primero que hay que hacer es comprobar si en la zona del domicilio hay suministro de gas disponible y, si es así, hay que llamar a una empresa o instalador autorizado para pedir presupuesto y estudiar la viabilidad de la instalación. Si el estudio de viabilidad es positivo, entonces se podrá solicitar la acometida de gas natural y comenzar con las obras para su instalación. Al mismo tiempo, hay que tramitar el certificado de la instalación y el CUPS (Código Universal del Punto de Suministro), y presentar la solicitud de alta en el servicio con la comercializadora que se haya elegido. Una vez terminada la instalación, y previo a la aprobación del contrato, esta debe superar una revisión.
El siguiente paso sería la formalización en sí del contrato con la compañía del gas y en este punto, es importante la elección de la tarifa que mejor se adapte a las necesidades de consumo particulares de cada vivienda. Dentro de este contrato se elige también la forma de pago. Una vez comprobados todos los datos y verificada la tarifa más adecuada, entonces ya se podrá firmar el contrato y comenzar a disfrutar del servicio.
Tipos de instalación de gas natural
Hay dos tipos diferentes de instalación de gas natural, y esto depende el tipo de vivienda o inmueble donde se pretenda hacer dicha instalación. Estos son básicamente dos: la Instalación Receptora Común (IRC) o la Instalación Receptora Individual (IRI).
Instalación Receptora Común: Por lo general, los edificios y comunidades de vecinos son los que tienen este tipo de instalación de gas natural. La misma cuenta con toda la infraestructura y equipos necesarios para distribuir el gas desde la válvula de la acometida hasta las instalaciones receptoras individuales (IRI) de cada vivienda o piso. Se puede llevar a cabo de dos maneras distintas: puede hacerse a través de una sala de contadores centralizada, o a través de contadores individuales, los cuales están situados en las diferentes viviendas o pisos de la comunidad de vecinos.
Instalación Receptora Individual: Las viviendas unifamiliares y los pisos son los que tienen instalación receptora individual (IRI). Este tipo de instalación no es otra cosa que la red de tuberías que recorren el interior de los inmuebles o viviendas por donde se distribuye el gas hacia todos los puntos necesarios. Esta instalación, a su vez, se ha de conectar a una instalación común (IRC) o a la distribución general del suministro.
Precio de la instalación de gas natural
Para calcular el precio total de una instalación de gas natural hay que tener en cuenta diferentes factores, pues depende del tipo de instalación, de las dimensiones del inmueble o vivienda y de las características de los equipos. Igualmente influye en el costo el grado de dificultad de las obras, así como los servicios que se pretenden incluir, como la cocina, el agua caliente, la calefacción, u otros.
Por otro lado, también habría que tener en cuenta las posibles ayudas o descuentos que se podrían aplicar en cada caso, así como si existe una instalación de gas natural previa en el edificio, local o vivienda donde se pretenda llevara el suministro. Por supuesto, la mano de obra también cuenta a la hora de elaborar el presupuesto. No obstante, una instalación IRC, suele costar unos 2.500 euros. En cuanto a las instalaciones IRI, su precio depende principalmente del tipo de vivienda, es decir, si se trata de un piso o de un adosado o vivienda unifamiliar. No obstante, suele rondar los 1.500 euros aproximadamente.
Por último, en cuanto al tiempo que se tarda en tener instalado el gas natural, el tiempo estimado para las instalaciones IRC oscila entre los 30 y 90 días hábiles. En el caso de las instalaciones IRI, el plazo puede variar, pero se sitúa entre los 30 y los 60 días hábiles.
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