Un juzgado de Barcelona investiga a un trabajador de Cementiris, la empresa municipal de camposantos, por estafa. El empleado se enfrenta a pesquisas judiciales por, presuntamente, tratar de cobrar hasta 2.000 euros de propina por colocar a los fallecidos en las mejores ubicaciones.
Lo ha avanzado El Periódico, que ha precisado que el asalariado habría intentado cobrar a ocho familias a cambio de elegir las mejores sepulturas para sus seres queridos. A cambio, el investigado pedía entre 1.800 y 2.000 euros.
Las reglas lo impedían
El presunto estafador no consiguió perpetrar su fechoría porque el reparto de nichos en los ocho cementerios públicos de Barcelona está sujeto a reglas estrictas.
No obstante, su añagaza trascendió después de que una afectada informara al Ayuntamiento de Barcelona, que trasladó el caso a sede judicial y comenzaron las pesquisas para averiguar la veracidad de la denuncia particular.
Desahucios
Cabe recordar que Cementiris de Barcelona, presidida por Eloi Badia (BComú), es una de las empresas municipales más rentables de la estructura de la Administración local.
A este respecto, la enseña no ha titubeado a la hora de desahuciar nichos por impago de las tasas administrativas. Solo en 2020, el grupo ingresó 7,5 millones de euros por este motivo, como explicó este medio.