Los Mossos d’Esquadra investigan 14 denuncias por pinchazos a mujeres en discotecas de Lloret de Mar (Girona) y locales de Barcelona. Todos los casos de los que tiene conocimiento la policía catalana con este método, que deriva en la sumisión química de las que reciben la droga involuntariamente, no ha acabado en agresión sexual ni robo posterior.
Del total de casos, según han informado fuentes policiales, 11 se produjeron en locales de ocio nocturno de Lloret de Mar, mientras que el resto, otros tres, sucedieron en locales de la capital catalana. El modus operandi de los autores de los pinchazos es similar en todos los casos.
Llamamiento a la tranquilidad
El ocio nocturno ha respondido ante estas agresiones. El secretario general de la Federació Catalana d’Associacions d’Activitats de Restauració i Musicals (Fecasarm), Joaquim Boadas, ha hecho un llamamiento a la tranquilidad y a la calma: “Son casos puntuales y excepcionales en Cataluña”.
Boadas ha asegurado que desde Fecasarm se han adoptado medidas para evitar las violencias sexuales. Más, desde que la práctica de los pinchazos, originada en Francia y Bélgica, llegara a España una vez que se reabrió el ocio nocturno legal.