La muerte de un gato en Tarragona hace saltar las alarmas y apunta a un posible caso de envenenamiento. El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil investiga el suceso en la capital provincial y su relación con el fallecimiento del felino.
Las colonias de gatos, muy habituales en la mayoría de ciudades y sus urbanizaciones, podrían haber sido el detonante para que alguien haya intentado envenenar su comida con el objetivo de mermar su población. No obstante, el Seprona ha iniciado las gestiones para descubrir si realmente el felino muerto este martes en la ciudad tiene relación con estas prácticas.
Un coche del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, en una imagen de archivo / GUARDIA CIVIL
Todo indica a que fue envenenado
Un voluntario de una asociación sin ánimo de lucro, encargada del control de las colonias de gatos de las urbanizaciones de Rodolar del Moro y Sant Pere i Sant Pau de Tarragona fue el que halló este martes al animal moribundo con vómitos y convulsiones. Finalmente falleció. Estos hechos fueron puestos en conocimiento de los agentes del Seprona.
La Guardia Civil, a través de su servicio de protección de la naturaleza, inició las gestiones para intentar aclarar los hechos. Descubrieron que el animal estaba en perfectas condiciones el día anterior, lo que “parecía indicar que podía haber sido envenenado”. Esta tesis implicaría que existe una amenaza real contra estas colonias de gatos en Tarragona, aunque la investigación sigue abierta.