Evitar las estafas vacacionales es uno de los objetivos cuando se quieren pasar unos días en otra ciudad. A pesar de su proliferación, es posible no caer en engaños si se siguen una serie de consejos.
Las estafas vacacionales en Cataluña han provocado que cientos de personas hayan pagado un adelanto de un alquiler del que nunca llegaron a disfrutar. Las zonas costeras y el área de Barcelona son las más sensibles a este tipo de engaños.
Estafas vacacionales en Cataluña
Hay diversas formas de estafa relacionadas con los alquileres. Una de las más comunes consiste en publicitar una propiedad a un precio imbatible y con unas imágenes muy atractivas. Al adelantar el pago y llegar a la vivienda, abre el propietario o el arrendatario correspondiente, lo que confirma el timo. Otra variante es la de alquilar un apartamento al propietario y, posteriormente, el arrendatario volverlo a alquilar por días o semanas a un tercero. En este caso, el dueño puede anular el contrato de inmediato.
En lo que respecta al uso de internet, los pagos de la fianza por transferencia o Bizum suponen un ingreso para el delincuente a cambio de nada. Pero también son estafados los propietarios que alquilan legalmente su propiedad sin recibir el prometido dinero una vez terminada la estancia.
Recomendaciones para evitar ser víctima de una estafa
Si se alquila una propiedad en otra ciudad, es imprescindible repasar algunos factores. Por ejemplo, el pago de la fianza es legal en concepto de reserva, pero ha de especificarse a quién se le paga y pedir la información personal necesaria para presentar una demanda llegado el momento.
Por otro lado, se aconseja no quedarse con la primera oferta que se vea en internet. Los estafadores suelen poner precios muy bajos que nada tienen que ver con los del mercado real. En estos casos, consultar los precios medios en otras páginas o en las inmobiliarias de la ciudad resulta muy recomendable, así como alquilar en una web con sello de calidad y especializada en el sector.
También es usual que el mismo anuncio y las mismas fotografías se repitan en diversas páginas de anuncios por palabras. Bastaría con usar una dirección de correo electrónico distinta para intentar alquilar el mismo apartamento para unas fechas concretas. Si es una estafa, siempre estará disponible y habrá cierta presión para que se haga el ingreso del dinero lo antes posible.
¿Cómo no ser estafados en vacaciones si se es propietario?
Sobre todo, repasando detalladamente cada mensaje que se envía. Es imprescindible desconfiar de los textos escritos en un lenguaje extraño. La excusa del turista extranjero que no conoce nuestro idioma es la más habitual para justificar este tipo de errores.
Asimismo, los que quieren veranear sin pagar nada alegan que el apartamento es para un amigo, para celebrar una despedida de soltero o que viajan por trabajo. Es decir, la transferencia la tendría que hacer siempre otra persona y, precisamente por esta razón, nunca llega a producirse.
Tampoco es aconsejable confiar en los que indican que les encanta la propiedad por un motivo específico que no pueden conocer o que no se incluye en las fotografías. En ocasiones, se reciben ofertas que duplican o triplican el precio del alquiler publicitado al subrayar que solo tienen esos días libres y que quieren disfrutar del piso o de la casa correspondiente. Evidentemente, nadie va a pagar más por el mismo producto en una zona turística concreta.
Las reservas en el último minuto no siempre son fiables. Debe sospecharse siempre si se dan excusas como que en el hotel reservado no hay habitaciones o similares. Otra de las estafas más habituales es la que convierte al solicitante en un arrendatario anterior o en su abogado para solicitar el pago de una indemnización por los daños sufridos.
Incluso es posible que el falso abogado contacte con el propietario para representarle legalmente si tuviera algún problema durante el verano. Ambas opciones conllevan la solicitud de los datos personales para poder actuar en su nombre de manera ilícita. Por último, contactar con el dueño o la dueña del piso para anunciarle que se va a publicar una reseña negativa, que puede evitarse a cambio de dinero, es bastante habitual.
Se recuerda que las estafas también pueden llevarse a cabo desde la propiedad alquilada a través de la conexión wifi. Apagarlo es la mejor alternativa para ganar en tranquilidad.
La previsión como mejor medida
Como se ha comprobado, evitar las estafas vacacionales exige prestarles la máxima atención posible a aspectos que parecen menores, pero que terminan siendo de vital importancia. Ello no significa que todos los interesados en una propiedad sean estafadores potenciales, aunque sí que hay que ser precavido para evitar sorpresas de última hora. Todo sea por no formar parte de la nómina de estafados al final de este verano.