La verbena de San Juan ha arrancado en Barcelona con las playas abarrotadas, después de dos años marcados por las restricciones del Covid-19. De hecho, es la primera vez desde el inicio de la pandemia que todas las playas de la capital catalana están abiertas.
Los petardos son los protagonistas de esta noche, sumados a las cocas de Sant Joan y a las fiestas en todos los distritos de la ciudad, donde se harán las tradicionales hogueras. En Barcelona está permitido el uso de pirotecnia y la manipulación de fuego a más de 500 metros de la zona forestal de Collserola y de Montjuïc, que los bomberos vigilarán con especial atención. No obstante, el Ayuntamiento de Barcelona cerrará excepcionalmente el Parc del Turó de la Peira, y ha avanzado el cierre del Parc de Diagonal Mar a las 15.00 horas para facilitar el desalojo de personas. También ha cerrado cinco interiores de manzana del frente litoral entre Bac de Roda y Selva de Mar, además de los 150 parques y jardines que se cierran habitualmente.
Dispositivo especial de seguridad
En toda Cataluña la policía marítima participará en el dispositivo de seguridad de la noche, que también incluirá decenas de drones tanto de Agents Rurals como de Bombers de la Generalitat para vigilar los bosque ante el elevado riesgo de incendios.
Por su parte, el dispositivo de Mossos d'Esquadra involucra a 2.400 agentes, que harán 1.000 controles durante toda la noche, y se han reforzado los cuerpos de Bombers, Agents Rurals y trabajadores del teléfono de emergencias 112.