Un juzgado de Barcelona ha condenado a 16 meses de prisión a dos hombres que se hicieron pasar por cirujanos plásticos en Barcelona durante 12 años. Durante ese periodo de tiempo, los falsos cirujanos ocasionaron secuelas como mínimo a cinco de las personas que se sometieron a retoques faciales y operaciones estéticas.
La sentencia, emitida por el juzgado de lo penal número 11 de Barcelona, condena también a un tercero que se encargaba de las gestiones mercantiles de los cirujanos, y que tendrá que hacer frente junto a ellos a las indemnizaciones de las víctimas.
Operaciones en domicilios y peluquerías
La magistrada considera que los tres acusados se dedicaron “de mutuo acuerdo” a realizar operaciones estéticas entre el año 2000 y el 2012 en una clínica que abrieron para tal efecto en la calle Muntaner de Barcelona.
En esta clínica anunciaban y realizaban tratamientos de estética y cirugías, aunque llegaron a operar a algunos clientes en sus propios domicilios y en peluquerías. Esta práctica se repitió durante 12 años pese a que ninguno de ellos tenía la formación necesaria ni disponía de ninguna titulación para realizar ese tipo de intervenciones.
Usaban silicona líquida
La mayoría de las víctimas se sometieron a un aumento de labios, para los que los acusados utilizaron silicona líquida. Las secuelas que les produjeron a los pacientes fueron, entre otras, granulomas, hipersensibilidad, úlceras, dolor o palpitaciones de diferentes grados de gravedad. Además, algunas personas estuvieron impedidas varios días a causa de las lesiones derivadas de las operaciones.
El 2 de julio de 2012, la policía inspeccionó la clínica de la calle Muntaner de Barcelona. En ella intervinieron material para hacer cirugías y revisaron un almacén en el que guardaban las sustancias utilizadas durante las intervenciones.
Intrusismo profesional y lesiones
Ahora, la Justicia considera culpables a los dos cirujanos de un delito de intrusismo profesional y de lesiones por imprudencia grave, así como otro delito contra la salud pública para uno de ellos. A la mercantil, por su parte, la hace copartícipe de los hechos como responsable civil subsidiaria.
Además de la condena de prisión, la magistrada ha dictado para los falsos cirujanos una inhabilitación especial de entre uno a tres años para cubrir trabajos relacionados con tratamientos médicos y el uso de medicamentos o productos sanitarios. Todos ellos tendrán que indemnizar con 8.000 euros a las víctimas y uno de ellos tendrá que abonar una adicional de 720 euros por el delito contra salud pública que solo le repercute a él.