Cataluña ha despertado con temperaturas entre los 20 y 25 grados. Durante el miércoles, los termómetros alcanzaron 43,1 grados en el embalse de Riba-roja y 42,6 en Vinebre. Este jueves, la ola de calor alcanzará su pico y se esperan episodios similares. La Conca de Tremp, el Pla de Lleida y el extremo norte de Terres de l’Ebre serán los lugares con registros más altos, por encima de los 40 grados. Esta situación complica la extinción de los incendios que están activos en estas zonas.
Meteocat ha activado una alerta roja, la más alta posible, debido a este episodio de calor extremo. Este aviso continuará en vigor hasta el sábado por la tarde, cuando las temperaturas empezarán a bajar. Con el fin de paliar la sensación de bochorno, el Departament de Salut recomienda hidratarse y evitar exponerse a sol durante las horas centrales del día.
Avisos preventivos
El aviso preventivo por niveles altos de ozono troposférico continúa activo. Esta alerta se ha extendido a el Pirineo Oriental y las Comarcas de Girona, además de la Plana de Vic y la Cataluña Central, donde ayer ya estaba en vigor. En estos territorios, se recomienda que las personas vulnerables reduzcan el ejercicio en el exterior.
El Área Metropolitana de Barcelona también mantiene su alerta preventiva de contaminación atmosférica por partículas de PM10 en suspensión activado. Este episodio, causado por la intrusión de una nube de polvo africano, aumentará la sensación de sofoco.
Lluvia en el Pirineo
Es posible algún chubasco débil o localmente moderado en el Pirineo, que podrá aparecer en forma de tormenta. La cordillera pirineica y el norte del territorio también esperan nubes a lo largo de la tarde.
La visibilidad será buena y se esperan rachas flojas de viento en la mayoría de puntos de la autonomía. En el Pirineo no se descarta que el viento sople fuerte.