Proteger a los mayores frente a la digitalización. Esta es una de las tesis que han surgido de la segunda jornada del V Encuentro de Economía Senior celebrado en Madrid. Este evento trata el impacto de la revolución demográfica en todos los entornos, especialmente el tecnológico y la innovación social.
“La Administración pública es otro de los sectores --además de la banca-- que debe tomar medidas que protejan a los mayores”, ha señalado durante las jornadas el médico jubilado impulsor de Soy mayor, no idiota, Carlos San Juan. El facultativo retirado ha asegurado que “hay un grupo” que “necesariamente tiene que permanecer en la burbuja analógica”, por su incapacidad para adaptarse a la digitalización actual.
Brecha digital
“Dentro del colectivo de mayores, concretamente mayores de 75 años, hay un 40% de personas a las que les cuesta llegar a final de mes en España. ¿Cómo vamos a pedir a estas personas que tengan internet o teléfonos inteligentes?”, ha explicado San Juan para reforzar la idea alternativa de mantener los cauces tradicionales en muchos sectores. El médico, no obstante, ha asegurado que el Gobierno “está intentando simplificarlo” para que las personas de más edad no tengan que pedir cita a través de un dispositivo y “pasar por el calvario de la digitalización”.
El director científico del programa de mayores de la Fundación “la Caixa”, Javier Yanguas, ha expuesto la responsabilidad del conjunto de la sociedad para lograr un envejecimiento digno y autónomo: “La vejez es heterogeneidad”. En este sentido ha señalado las diferencias que vemos entre un niño y un joven pero gozamos “de incapacidad” para observarlas “cuando uno es mayor, sabiendo que existen”, ha aseverado.
Cohesión social y compromiso
“No solo está en juego un sector concreto de la población, sino la cohesión social, y necesitamos mirar el futuro de las decisiones actuales y comprometer también a otras generaciones”, ha dicho Yanguas. Por lo que ha pedido hacer frente a este “desafío” para ir “hacia esa ansiada interdependencia” con medidas concretas.
Por su parte, la presidenta de la Sociedad de Geriatría y Gerontología de la Comunidad Valenciana, Sacramento Pinazo-Hernandis, ha recordado que “nos falta dignificar más la vejez”. Lo que sería posible, en sus palabras, cuando la política se adapte a los “cuidados que serán necesarios en el tiempo y a esas personas que envejecen”. Algo que podría llegar a colapsar, y por lo que se necesitarán más centros, a medida que pasen los años y los baby boomers envejezcan. “No nos olvidemos de la educación: tenemos que enseñar desde pequeños a los niños que necesitamos el cuidados, que somos cuidados y que seremos cuidadores”, ha sentenciado.