Calma en las carreteras catalanas durante la ‘operación retorno’ de este lunes

La operación retorno deja alguna congestión, pero impera la calma en la mayoría de las carreteras catalanas. El Servei Català de Trànsit (SCT) espera que vuelvan 290.000 vehículos al área metropolitana de Barcelona este lunes hasta medianoche, por la celebración de la Segunda Pascua, festivo en Cataluña.

Los últimos datos de Trànsit, a las cuatro de esta tarde, señalan que tan solo el 33% de los vehículos que se pronostica retornen hoy, han llegado al cinturón barcelonés. Un total de 95.022. Por lo que podrían darse retenciones más persistentes y de larga duración a partir de media tarde.

Una calle de Barcelona con tráfico, en una imagen de archivo / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA - EP

Retenciones en la AP-7

La circulación es fluida en la mayoría de las vías de la comunidad. Sin embargo, las ya endémicas retenciones de la AP-7 han comenzado a aflorar entre las 12 del mediodía y las cuatro de la tarde. Se registran, así, 12 kilómetros de colas a la altura de L'Arboç (Tarragona) en dirección Barcelona y otros ocho en La Roca del Vallès hacia la capital catalana.

También hay, en esta misma autopista, tres kilómetros en Vallgorguina (Barcelona), cuatro en Vilafranca del Penedès (Barcelona) y uno y medio en L’Ampolla (Tarragona), en los tres casos en sentido a la Ciudad Condal. Trànsit ha habilitado en la AP-7 un carril más en dirección contraria durante 39 kilómetros entre Molins de Rei y Santa Margarida i Els Monjos.

Carril habilitado en la AP-7 / SERVEI CATALÀ DE TRÀNSIT

Primeras congestiones en la C-31

Aunque la AP-7 suele ser la arteria principal para la vuelta de los puentes o fines de semana largos en Cataluña, las carreteras que transitan por la costa también han comenzado a padecer tráfico lento. Es el caso de la C-31, con retenciones de seis kilómetros en Santa Cristina d’Aro (Girona) hacia Llagostera.

El tráfico va en aumento en el litoral sur metropolitano, con tres kilómetros de retenciones en Vilanova i la Geltrú (Barcelona) en dirección a la capital catalana. Esta vía, dado el buen tiempo, podría desencadenar colas que se extiendan por la C-31 y la C-32 hacia la Ciudad Condal, especialmente entre las poblaciones de Castelldefels y Viladecans.