El sargento de la unidad antidisturbios (BRIMO) de los Mossos d'Esquadra imputado por la pérdida de un ojo de una mujer en una manifestación contra el encarcelamiento del rapero Pablo Hasel en 2021 ha esgrimido razones de seguridad para justificar que se disparan pelotas de foam.
El acusado ha declarado este miércoles en el juzgado de instrucción número 1 de Barcelona por el incidente que se produjo en las inmediaciones de la comisaría de la Policía Nacional de Via Laietana de Barcelona en febrero de 2021, que estaba siendo custodiada por los Mossos, y que comportó la pérdida de un ojo a una de las manifestantes.
No concreta si autorizó el disparo
El investigado, que solo ha respondido las preguntas de la defensa en una declaración donde tampoco estaba presente el Ministerio Público, ha justificado la necesidad de actuar de esta manera pese a reconocer que la visibilidad de la que disponían era baja, han explicado fuentes judiciales.
Además, el agente ha relatado que en ese momento no recuerda que tuviera constancia de ningún incidente, ni siquiera de que el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) trasladara a una herida, y que se enteró con posterioridad de los hechos por los que ha sido imputado.
Pese a ser el responsable policial y explicar que fue autorizado por el CECOR --la sala de mando--, el acusado no ha detallado si fue él quien autorizó el disparo concreto que causó la pérdida del ojo de la manifestante.
"No se puede controlar"
El abogado de la acusación particular, Xavier Muñoz, ha criticado tras la declaración ante el juez la actitud del mosso de no querer responder las preguntas de la acusación para explicar "con toda transparencia" cuál era su acción y si era correcta.
"Esto en la práctica significa que la de hoy ha sido una declaración de investigado absolutamente falta de los más mínimos principios que nos puedan llevar a la resolución del asunto, porque no ha habido ningún tipo de respuesta a las preguntas que puede ejercer la acusación", ha señalado Muñoz.
Además, ha asegurado que con su declaración se reitera que "las balas de foam y sus lanzadoras no son instrumentos de precisión", y que no se puede controlar el disparo que efectúa un lanzador.
El jefe de la armería declarará el 18 de julio
Para este miércoles estaba prevista también la declaración en calidad de testigo del jefe de la armería de los Mossos d'Esquadra, que ya se había pospuesto con anterioridad y que ha quedado fijada para el próximo 18 de julio.
La declaración se ha producido después de que la Audiencia de Barcelona haya aceptado su imputación, tras un recurso presentado por la asociación Irídia, que ejerce como acusación popular en el caso.
Los hechos acontecidos se remontan a febrero del año 2021 durante las protestas por el encarcelamiento de Pablo Hasel en las inmediaciones de la comisaría de Policía Nacional de Vía Laietana, en la que los Mossos d'Esquadra se hacían cargo del cordón de seguridad que protegía el recinto.