Una veintena de discotecas de Barcelona repartirán o venderán tapas para los vasos para evitar que alguien pueda echar sustancias químicas o estupefacientes en las bebidas con la intención de cometer una agresión sexual.
Así lo ha comunicado este jueves la Federación Catalana de Asociaciones de Actividades de Restauración y Musicales (FECASARM) a través de su cuenta de Twitter, que prevé que la medida entre en vigor en junio.
"Pregunta por Ángela"
Los propietarios de las discotecas ofrecerán tapas desechables de aluminio para cubrir los vasos y que, además, disponen de un código QR con línea directa a la policía.
La medida forma parte de un protocolo internacional para prevenir agresiones sexuales, denominado Ask for Angela (Pregunta por Ángela), que consiste en preguntar a un camarero por Ángela para expresar que la mujer está en situación de peligro.