El personal laboral del Departamento de Educación se une a la huelga total de este miércoles y del 9 de junio. Dos jornadas de paro que no tendrán el mismo peso que las convocadas en marzo, cuando toda la comunidad educativa se movilizó contra el conseller Josep Gonzàlez-Cambray.
El personal laboral de la Conselleria está formado por unas 4.000 personas en total entre educadores, cocineros, limpiadores y conserjes de guarderías públicas, auxiliares de educación especial, técnicos e integradores sociales de la escuela primaria y secundaria, fisioterapeutas y audioprotesistas de servicios educativos.
Personal necesario, pero invisible
La coordinadora nacional del personal laboral de Ustec, Anaís López, considera que se trata de un personal “necesario e imprescindible en las aulas, pero invisible” para la Conselleria que lidera Cambray.
En este sentido, desde Ustec exigen un plan de estabilización para todos los trabajadores con contrato temporal, que “suponen el 80%” del total. También reclaman un aumento del personal laboral en todos los centros para garantizar la atención de todo el alumnado. Y alertan: “El curso que viene no se renovarán las 400 plazas de personal laboral establecidas como refuerzos Covid”.
Equiparar ratios a la normativa europea
Además, el sindicato pide equiparar las ratios de educador por alumno a la normativa europea, que establece un profesor por cada cuatro niños en la etapa de lactancia, uno por cada seis en P1 y uno por cada ocho en P2.
Por último, López ha expresado que muchas veces “el personal laboral hace funciones que no le corresponde debido a la poca información que tienen las directivas de los centros, que se aprovechan de la buena voluntad de los trabajadores”. “Los educadores de educación especial han de dar apoyo al alumnado coordinándose con los tutores, pero no pueden sustituir a maestros cuando haya una ausencia”, ha concluido.