Hablan los vecinos del inmueble de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) devorado por las llamas de madrugada, un incendio que ha acabado con la vida de tres personas y ha dejado otro inquilino en estado crítico, ingresado en el hospital Vall d’Hebron. “El edificio estuvo okupado siete años, había problemas y peleas”, relata Eduardo Román Guijarro, a quien los Bomberos han rescatado por el balcón cuando el fuego ya ocupaba toda la escalera del número 23 de la calle Sant Joaquim.
“He tenido que salir al balcón porque no podía estar dentro de casa”, ha explicado Román ante las cámaras. Está consternado y abona la tesis con la que trabajan Mossos d'Esquadra: que el incendio ha podido ser provocado.
Otros residentes manifiestan a Crónica Global que, hace un año y medio, la dueña de los pisos, que fueron okupados, “decidió poner un alquiler social” a los inquilinos que residían de forma ilícita en lugar de iniciar un proceso de desahucio. En estos momentos, solo dos de los seis pisos están regentados por vecinos como Eduardo, que pagan un alquiler conforme al precio de mercado del inmueble. Todos ellos residen en las primeras plantas.
"Sacaron cuchillos"
En el resto se han quedado los antiguos okupas y, entre ellos, se encuentran "individuos conflictivos". De hecho, los vecinos declaran que, el pasado fin de semana, hubo una pelea en uno de los pisos de la segunda planta, una de las viviendas que han resultado más afectadas por el incendio. “Siempre había peleas, ponían la música a tope hasta las cuatro de la mañana”, explican desde la calle Sant Joaquim. Las peleas entre vecinos ya habían escalado en algunas ocasiones. Es más, “sacaron cuchillos” en la discusión de hace unos días.
La difícil situación de convivencia en el edificio era conocida en la zona y explica, entre otras, las pintadas que hay en la puerta del inmueble contra los allanadores.
"El domingo vinieron los Mossos"
Jacqueline, otra de las vecinas que han tenido que abandonar su casa deprisa y corriendo la madrugada de este miércoles, ha corroborado que el pasado domingo se personaron los Mossos por otra pelea en el número 23 de esta calle de Santa Coloma. Sostiene que no sabe "si el fuego fue intencionado", aunque reconoce que no le extrañaría que los problemas de convivencia expliquen el fatal suceso. Recuerda que los vecinos se decían entre ellos que "se iban a matar" y sospecha, sin más indicios que sus vivencias, que es posible que se haya materializado la amenaza.
¿Cómo vivió la deflagración? "El fuego empezó por unos muebles que estaban abajo. Un sofá, un colchón… todo se ha quemado", precisa. "No pude salir de mi casa porque había mucho humo en la escalera, por lo que me refugié en el balcón". "Ha sido horrible, estaba desesperada por lo que le podría suceder a mi hija pequeña", lamenta.
Los vecinos también lo ven "provocado"
Los vecinos coinciden en que el incendio ha sido provocado por alguno de los antiguos okupas. Algo que tampoco descarta la policía autonómica. Respecto a los muebles antiguos que estaban en el rellano y que han sido, según las pesquisas iniciales, el origen de las llamas, los tenía que recoger el Ayuntamiento de Santa Coloma. “Pero daban largas y nunca se los llevaban”, afirma Román, que no sabe cuándo podrá volver a su casa.
Por su parte, el consejero catalán de Interior, Joan Ignasi Elena, ha expresado sus condolencias a las víctimas y a sus familias a través de las redes.
Alcaldesa Parlón: "Había problemas de convivencia"
A media mañana, la alcaldesa de Santa Coloma, Núria Parlón (PSC), ha confirmado que desde el consistorio conocían que en el bloque había "problemas de convivencia, como discusiones por música alta y peleas". En declaraciones a RAC1, la edil ha indicado que tanto Mossos como Policía Local habían sido requeridos en este edificio en diversas ocasiones.
Parlón ha añadido que el propietario de la finca es una inmobiliaria de Barcelona que accedió a aplicar alquileres sociales a los okupas que hacía tiempo que residían allí. Sin embargo, ha emplazado a esperar los resultados de la investigación judicial antes de extraer conclusiones y buscar responsabilidades sobre si se debía haber actuado antes para evitar que las peleas entre vecinos llegaran al trágico resultado final.